El PSOE se lanza al ataque a por Alberto Núñez Feijóo. Su paso por la Cadena SER, donde justificó la violencia machista cuando fue preguntado por la condena del cabeza de cartel de Vox para presidir la Generalitat Valenciana, Carlos Flores, ha motivado a los socialistas para responder en masa al jefe de la oposición. Primero, a través de redes, con la plana mayor del partido contribuyendo a la denuncia, después a través de los medios de comunicación y, por último, con un durísimo vídeo que han lanzado a través de sus principales plataformas de difusión. “Eran los años 90… O no”, reza uno de los letreros del clip tras unas declaraciones de varios hombres en las que hablan abierta de maltratar a sus parejas.

El presidente del Partido Popular “justificó” la violencia machista ante los micrófonos de la Cadena SER. Lo hizo este pasado lunes, cuando intentaba explicar los acuerdos de su formación con Vox, con atención especial al de la Generalitat Valenciana. El candidato ultra a presidir la región, Carlos Flores, fue condenado por violencia machista en 2002 y encabezaba la delegación del partido de Santiago Abascal para negociar con los conservadores. Sin embargo, estos, según explicó el propio Feijóo, pidieron un cambio de interlocutor ante la pena que pesaba sobre él, que aunque lejana, constituía una “línea roja” para los populares. Al menos así lo explicaron resortes de Génova.

A pesar de todo, el titular de la entrevista de Feijóo con Aimar Bretos no fue por sus críticas a la ultraderecha, sino más bien por el blanqueo efectuado sobre la condena del líder de Vox en Valencia. “Tuvo un divorcio duro y conllevó un abuso verbal hacia su exmujer”. Así explicaba el jefe de la oposición el episodio de violencia machista que a Carlos Flores le valió una condena por la Audiencia Provincial de Valencia por un delito de “violencia psíquica habitual y 21 faltas de coacciones, injurias y vejaciones” contra su expareja, a la que insultaba con calificativos tales como “puta, ladrona, secuestradora de niños o dueña de calabozo”, tras personarse en el domicilio de ésta.

“Así justifica la violencia machista”

El vídeo del PSOE tiene como mensaje central esas palabras de Feijóo, enmarcándolas como una “justificación de la violencia machista”. A su vez, tiran de hemeroteca para recoger declaraciones de personajes anónimos que en la década de los 90 no sólo hablaban abiertamente del maltrato hacia la mujer, sino que también lo defendían y lo entendían como algo normal. “Eran los años 90… O no”, rotulan desde el PSOE, encuadrando la salida de tiesto del líder gallego en un discurso ya superado y de antaño.

“Si tu mujer es una guarra, pues la tienes que partir la cara”, “están en su derecho, pero ¿cuáles son sus derechos?”, “las mujeres sumisas ya no existen” o “·si veo que se está pasando, pues la tendré que dar un correctivo”, son algunas de las píldoras que el PSOE ha escogido para equipararlas al “divorcio duro” que verbalizó Núñez Feijóo. No obstante, la más chocante es la que expresa una mujer, quien asegura que “no están para ir a la calle, sino para estar en casa”. Palabras que hoy día parecen de otro mundo, pero que reflejan las reminiscencias de un problema que, aunque se reduce poco a poco, sigue existiendo y que perdura, en parte y a ojos del PSOE, por cuestiones como las que trata en el vídeo.

 “Se llama violencia de género. Eran los años 90… O no. Así se justifica la violencia machista. Así es cómo peligra la libertad y la seguridad de las mujeres”, denuncian los socialistas, quienes aprovechan para introducir la intervención ante los medios de comunicación de su portavoz y ministra de Educación, Pilar Alegría. “Es doloroso y vergonzoso”, denunciaba la dirigente socialista en alusión a las declaraciones de Feijóo.

A su juicio, el líder conservador “redujo la violencia machista a un divorcio duro”. Entiende Alegría que es una “curiosa forma de afrontar el problema” por parte del PP, a juzgar por las más de 1.200 mujeres asesinadas desde 2003 y las más de 60 en este año. “Borran la violencia machista de los acuerdos que alcanzan”, denunciaba la portavoz del PSOE, quien al mismo tiempo subraya que lo que se exige frente a un problema real es "contundencia y unidad y no desterrar de los acuerdos un problema que existe”.

Amén de la portavoz socialista, destacados rostros del PSOE salieron en tromba en redes sociales a contraatacar la dulcificación en la que, a su juicio, incurrió el líder gallego. La vicesecretaria general de la formación, María Jesús Montero, encabezó los reproches al jefe de la oposición. “España no se merece un presidente que justifique la violencia hacia las mujeres”, expuso la también ministra de Hacienda y Función Pública a través de sus redes sociales.