El pleno del gobierno valenciano presidido por el popular Carlos Mazón se ha reunido este jueves de manera extraordinaria para cesar de manera fulminante al que desde el pasado 26 de juliio era el subsecretario de Justicia e Interior de la Conselleria de Justicia, Luis Manuel Martín Domínguez, designado por Vox, por haber ocultado la existencia de una condena por violencia de género de 2011.

El cese, tal como ha explicado ante los medios de comunicación la portavoz del Consell, Ruth Merino, acompañada de la consellera de Justicia, Elisa Núñez, se produce por la “pérdida de confianza total”. “La decisión ha sido mía. Esta mañana he enviado una carta al presidente de la Generalitat en la que instaba al cese del subsecretario”, ha detallado.

Martín Domínguez fue designado por la formación ultraderechista en una de las primeras tandas de nombramientos tras la configuración del Ejecutivo autonómico entre PP y Vox. Hasta el momento, ni Elisa Núñez ni Ruth Merino han querido ofrecer más detalles sobre el contenido de la sentencia que ha terminado con el cese. Han dicho que trataba de “hechos graves”, pero han apelado al carácter “personal” del fallo y al amparo de la ley de protección de datos para no dar más información.

Cabe recordar que esta semana, el grupo parlamentario de extrema derecha y el PP en Valencia han modificado el protocolo en las Corts Valencianes para retirar el término “violencia machista” de las pancartas que muestran en los minutos de silencio. El lema ahora será “no a la violencia contra las mujeres”.

Carlos Flores, el polémico diputado valenciano condenado por violencia machista

Pero este no es el único caso de violencia de género que ha salpicado a dirigentes en la Comunidad Valenciana. Y es que la política valenciana de la nueva era del gobierno de Carlos Mazón ha estado marcada por aquellos miembros de Vox protagonistas de episodios de violencia de género. Sumado a este último caso del subsecretario de Justicia, cabe recordar el que fue cabeza de lista por el partido de extrema derecha en la Comunitat Valencia en las elecciones del 28 de mayo y que, posteriormente, logró el escaño como diputado en el Congreso: Carlos Flores Juberías.

Flores fue condenado en 2002 por “un delito de violencia psíquica habitual” con “coacciones, injurias y vejaciones” contra su exmujer en la Audiencia Nacional. La sentencia judicial reflejó que el acusado ejerció “quebranto psicológico” sobre la víctima y madre de sus hijos. Así las cosas, el actual diputado fue condenado en aquel momento a un año de cárcel, además de que fue inhabilitado para ser elegido por sufragio pasivo y se le prohibió acercarse a su exmujer durante tres años, además de que tuvo que indemnizarle por responsabilidad civil con una cantidad de 6.000 euros.

Tras haber consolidado un puesto de relevancia en la política valenciana y, recientemente, a nivel nacional en la Cámara Baja, trascendieron algunas de las graves amenazas que recogió la sentencia del condenado hacia la víctima de violencia de género: “Te voy a estar jodiendo toda la vida hasta que te mueras”, además de incluir insultos como “secuestradora de niños” y “ladrona”.