
Candela Peña ha vuelto a sorprender en otra gala del cine español al recoger un nuevo premio. Ha sido en el Festival de Málaga, cuando tras recibir la estatuilla por el premio a la mejor actriz por su interpretación en la película de Isabel Coixet Ayer no termina nunca se puso un trozo de cinta aislante en la boca como expresión de protesta tras la polémica generada por su discurso contra los recortes del Gobierno en la pasada gala de los Goya.
Sus críticas en los Goya
En aquellos premios, Candela Peña lanzó duras críticas a los recortes en sanidad y educación y se convirtió con ello en diana de los ataques de la derecha mediática, que pusieron en cuestión la veracidad de las palabras de la actriz, cuando afirmó que había visto morir a su padre “en un hospital público donde no había mantas para taparle ni agua para beber y se la teníamos que llevar nosotros". También censuró con dureza los recortes en educación y los desahucios: "En este tiempo ha salido de mis entrañas un niño que no se sabe qué educación pública tendrá, y ha visto a gente que se mata por no tener casa", afirmó.
Los ataques de la derecha al mundo del cine
Los ataques de la derecha mediática no fueron sólo dirigidos contra Candela Peña, sino contra el mundo del cine en general, por la crítica gala de los Goya, en la que muchos artistas reprocharon al Gobierno sus políticas, entre ellos la actriz Maribel Verdú, que fue, junto a Candela Peña, la más vilipendiada .
Candela Peña reconoció que nunca le hicieron tanto daño
En una entrevista en el Dominical de El periódico de Cataluña, Candela Peña ha reconocido que “nunca” le habían “hecho tanto daño” y que le ha dolido especialmente que algunos medios publicasen que lo "que dije de mi padre es mentira”. Confesó que no llevaba preparado ningún discurso la noche de los Goya, porque "iba convencida de que ganaba Ángela Molina”.
Sin embargo, esta vez, en los premios del Festival de Málaga, la actriz tampoco se conformó y volvió a rebelarse, porque el gesto de taparse la boca fue otra forma de protestar.