Los socios del Consell de la República han decidido, en la votación telemática abierta desde el 17 al 24 de octubre, que el independentismo catalán debe promover el bloqueo a la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.

El resultado de la votación, que concluyo el pasado lunes a las 18:00 horas, ha desvelado que el 74,9% de los socios que han participado han dicho “sí” al bloqueo, mientras que el 24,9% ha optado por el “no”, y el 0,2 de votos en blanco. Lo más relevante de todo es que solamente ha participado el 4,45% de los 90.484 socios censados.

La pregunta en cuestión que debían votar los socios del Consell tras haber propuesto Carles Puigdemont la consulta era: “¿El Consell de la República ha de promover el bloqueo a la investidura del presidente del Estado español por parte de los partidos independentistas catalanes?”.

No obstante, las consecuencias de la consulta serán más simbólicas que reales, ya que no es vinculante y no hay ningún partido, incluido Junts per Catalunya, que se sienta obligado a dejar de negociar con el PSOE por el resultado de esta votación. Lo único que puede generar este eventual resultado es una cierta presión interna en el partido del propio Puigdemont por parte de sus bases.

El Consell ha explicado que, una vez terminada la votación y hechos públicos los resultados, el gobierno del consejo comunicará los resultados a las direcciones de los partidos independentistas de inmediato. Fue el Consell el que anunció la consulta a principios de octubre, cuando la propuesta obtuvo los avales necesarios, un 1% de los registrados, que fueron validados por la Sindicatura Electoral.

Sí queda la incógnita de cómo interpretará el resultado de la consulta Carles Puigdemont, ya que fue el quien la promovió y es él el que preside el Consell desde Bruselas. Porque cabe destacar también que Puigdemont es quien encabeza las negociaciones con el PSOE para llegar a un acuerdo que le permita alcanzar la mayoría absoluta que le alce a la presidencia del Gobierno.

Mismo día que el acuerdo entre PSOE y Sumar

Este resultado se ha conocido en el mismo día en que PSOE y Sumar han anunciado su acuerdo programático que marcará la acción del próximo Gobierno. La reducción de la jornada laboral era uno de los principales escollos entre los dos equipos negociadores, hasta bien entrada la madrugada del lunes al martes.

Los socialistas aceptaron y cerraron el compromiso de impulsar la bajada de las 40 horas semanales sin contemplar “reducción salarial”. La ampliación de los permisos por nacimiento, una nueva subida del salario mínimo interprofesional (SMI) o la nueva tentativa de derogación de la ley mordaza marcarán también un documento que a las 12:30 horas de este martes han rubricado el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta segunda en funciones, Yolanda Díaz, en un acto público en el Museo Reina Sofía.

“Nos mueve España y nada ni nadie nos detendrá”, han subrayado Sánchez y Díaz mientras rubricaban en la mañana de este martes el acuerdo suscrito entre PSOE y Sumar. El documento con vistas a la investidura del jefe del Ejecutivo en funciones -para la que aún no hay fecha- tiene un marcado tinte social y laboral. El foco se ha situado sobre la reducción de la jornada laboral, pues este ha sido uno de los puntos de fricción entre ambas partes.

El programa lo componen once ejes programáticos orientados a “seguir avanzando” como país, tal y como han verbalizado tanto el líder del PSOE como la líder de Sumar en el acto en el Reina Sofía que ha durado unas dos horas.