Se acabaron las medias tintas. La campaña ha arrancado y los partidos entran en el sprint final para el 10N. Una semana que se antoja frenética y en la que las formaciones se tienen que reinventar. El Partido Popular ha modulado su tono desde el pasado 28 de abril en un intento por recuperar parte del voto de derecha moderada. Tanto es así que en Génova ya no interesa la participación de José María Aznar en los actos, pero sí cuentan con Mariano Rajoy.

El perfil aznarista de Pablo Casado en la campaña del 28 de abril resultó una estocada electoral para el Partido Popular. El coste fue el que todos conocen: una sangría de votos que llevó a los conservadores a perder 71 escaños nada más y nada menos. Un batacazo que provocó un cambio de estrategia radical en Génova. Desde entonces, los populares se mueven en un perfil más bajo y moderado, encabezado por el cambio de imagen del líder del partido.

En el anterior camino a unas elecciones generales, los actos del partido contaban con la inestimable aportación de José María Aznar, que se amoldaba al discurso radical de un partido que abandonó el centro-derecha tradicional para ubicarse en la frontera con Vox. Una participación que ya no será crucial en esta nueva carrera a las urnas.

Según informa El Español, Génova cuenta con un as en la manga y esa carta lleva la cara de Mariano Rajoy. El expresidente del Gobierno contará con más protagonismo gracias a su imagen de hombre pausado y moderado, un perfil al que se quiere adherir el Partido Popular y, por supuesto, el propio Pablo Casado, abandonando al que fuera su ídolo político y enviándolo a un segundo plano.

Fuentes de la formación conservadora han asegurado que Rajoy participará en varios actos de campaña y no sólo lo hará en su tierra, en Galicia. Tampoco estará siempre acompañada por Ana Pastor, aunque sí estará presente en la mayoría de mítines de la que fuera su ministra y presidenta del Congreso. En el partido indican que “es lo lógico y normal”.

Aznar se ofrece

Como Mariano Rajoy, José María Aznar también se ha puesto a disposición del partido en todo lo que necesiten durante esta campaña. Sin embargo, la estrategia para esta campaña es bien distinta. En el Partido Popular son plenamente consciente que la figura de su expresidente y exlíder espiritual de Casado surte efecto en un electorado ultraconservador y no garantiza unos resultados óptimos, como se pudo comprobar hace ocho meses.

Desde la formación popular explican, según cuenta El Español, que José María Aznar “no moviliza al electorado que nos interesa ahora”. Ven al expresidente como una figura temida por el pueblo y alejada del modelo centroderechista que quieren recuperar desde Génova, aprovechando, a su vez, que este espectro ideológico ha quedado vacuo con el volantazo de Ciudadanos.

La posición que marcan desde Génova no es un sinónimo de una no participación del expresidente en actos de campaña. Todo lo contrario. La cúpula del partido no contará con su colaboración para los actos nucleares, sino que han avisado a los diferentes barones para que puedan solicitar su inclusión en mítines quienes lo requieran.

“Nosotros le agradecemos muchísimo que se haya puesto a disposición de Pablo, pero esta vez queremos dar otra imagen”, explican. Eso sí, arguyen que la relación de Casado con sus todos sus predecesores es “excelente”. Pero la cúpula de la formación quiere borrar de un plumazo el legado de José María Aznar. “Esto es el PP de Pablo Casado, lo otro era un ensayo porque no daba tiempo a poner en marcha muchas políticas. Era una antesala”, zanjan.