La Fiscalía Provincial de Valladolid ha solicitado una pena de 9 meses de prisión por coacción y otros 9 meses por lesiones a su expareja contra Lucas Burgueño, el hombre que el pasado viernes acosó al diputado socialista Óscar Puente en un AVE destino Madrid. Burgueño fue denunciado por su expareja el pasado mes de agosto y el caso está pendiente de que se fije una fecha para el juicio. El hombre también fue detenido hace 15 días por atentado a la autoridad al agredir a dos policías y tiene una condena por agresión a un hostelero.

El acusado es el propietario de la vivienda en la que tenía alquilada una habitación su expareja. Un mes antes del vencimiento del contrato de arrendamiento, que cumplía el pasado 14 de agosto, Burgueño acudió a la casa y le pidió a la víctima que le diera las llaves de la misma, según el escrito de la Fiscalía que ha publicado el periodista Antonio Maestre.

La víctima decidió entonces dar las llaves a Burgueño y, a pesar de que ya había pagado la mensualidad del alquiler, el acusado se negó a devolvérselas y le dijo que tenía un minuto para salir de la vivienda. La denuncia en su escrito indica que “acto seguido el acusado saca al rellano de la escalera parte de las pertenencias” de la víctima, “para a continuación reaccionar violentamente cogiéndola por la espalda, abrazándola con ambos brazos para inmovilizarla y sacarla de la vivienda”. 

Según la acusación, la víctima sufrió lesiones como hematomas y arañazos en los brazos que requirieron de asistencia médica en el momento.

El documento de la Fiscalía Provincial de Valladolid explica que los hechos son constitutivos de un delito de coacciones, por el que puede ser condenado a una pena de prisión de 9 meses, y otro de lesiones, por el que puede percibir otros 9 meses. Ambos delitos acarrean además la privación del derecho de tenencia y porte de armas de 1 año y 9 meses a dos años. 

Los delitos de los que se acusa a Lucas Burgueño también conllevan una orden de alejamiento por la que el acusado no podrá aproximarse a la víctima, a su domicilio y a su lugar de trabajo a menos de 500 metros durante 1 año y 9 meses, incluso si la víctima no se encuentra en esas direcciones. Además, el acusado tampoco podrá comunicarse con la víctima durante ese período de tiempo por ninguna vía. Por si fuera poco, Burgueño se enfrenta además a una condena en el que se establezca una multa con la que indemnizar a la denunciante por perjuicios personales.

El acosador que aplaude el PP

El Partido Popular ha vuelto a ahondar en el acoso que recibió el diputado socialista Óscar Puente. En palabras del ‘número 3’ de Génova, Elías Bendodo, este lunes en rueda de prensa, ha vuelto a señalar la actitud del hombre que increpó al dirigente socialista, pero también ha reprochado la respuesta que esgrimió este. “Al final esto al ciudadano le produce rechazo. Cuando un líder decide poner en el punto de mira mediático a una persona, tiene que tener en cuenta las consecuencias. Si yo me pongo a decir aquí tonterías sería aquí la voz de mi partido. Óscar Puente es la voz del PSOE, del que él habló en la tribuna. Es un político faltón, tendrá otras virtudes, pero es un faltón, siempre lo ha sido”, ha señalado, para añadir que, en aquellas circunstancias, “se juntaron el hambre y las ganas del comer, tormenta perfecta”.

Sobre este episodio de acoso en el AVE, Bendodo asegura que se juntaron “un político faltón con uno en frente que le insultó": Estos picos no son buenos para nadie, menos cuando hay implicado un responsable público. Ni fue correcto el insulto o acoso al diputado ni proporcional la respuesta del diputado al ciudadano. No fueron correctas”, ha insistido.

Bendodo, sobre Puente: "Cada vez que habla sube el pan"

Así las cosas, ha extrapolado este episodio a lo vivido en la investidura fallida de Núñez Feijóo en el Congreso y, por ende, las intervenciones de Puente en la tribuna en representación del PSOE: “Tampoco fue correcto el nivel de insulto del diputado en la tribuna. Dije que me parecía bien que Sánchez no hablara porque al hablar Puente podemos ver en lo que Sánchez se ha convertido a Óscar Puente. Este es el nuevo PSOE y los españoles lo tiene que saber. Cada vez que habla sube el pan”, ha defendido ante los medios de comunicación.

Estas palabras se enmarcan dentro de las críticas que han ido esgrimiendo otros dirigentes populares en los últimos días sobre el mismo telón de fondo. El vicesecretario de Organización del PP, Miguel Tellado, fue uno de los que esgrimió las declaraciones más duras al respecto. El pasado viernes, llegó a defender que Puente “no ha sido víctima de una agresión”, sino que es un político que “no sabe encajar la crítica de un ciudadano sobre el apoyo del PSOE a la amnistía”, culpándole, por ende, de provocar “un retraso” en el tren en el que viajaba.

Después, añadió: “Mi crítica es contra el matonismo de este PSOE, retratada en la violencia verbal (Puente) y física (Daniel Viondi) que hemos visto esta semana. Todo lo demás es una tergiversación del equipo de opinión sincronizada del PSOE”, señaló. Sobre este último cargo socialista se refirió, del PSOE de Madrid, quien tocó "hasta tres veces en la cara" al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, durante un Pleno de Cibeles y que, posteriormente, presentó su dimisión. 

El propio Puente replicó a Tellado a través de sus redes sociales, todo ello después de que también el PSOE pidiera su cese por sus palabras. “No sólo no dimite. Exhibe su miseria moral y su limitación intelectual en toda su dimensión”, compartió el diputado socialista.