La nueva ley de Transparencia, anunciada a las puertas de las elecciones andaluzas y asturianas, no será aprobada, sin embargo, según ha confirmado Sáenz de Santamaría, antes del mes de junio. Se trata de una promesa de Mariano Rajoy del septiembre pasado con la vista puesta en las generales de noviembre, aunque en realidad era un proyecto que venía de la mano del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que llegó a elaborar un anteproyecto de ley, inconcluso por el adelanto de las elecciones.

10 años de inhabilitación para cargos que falseen datos
Sáenz de Santamaría también ha anunciado algunas medidas incluidas en el anteproyecto de esta ley, como el castigo de hasta diez años de inhabilitación y la correspondiente multa para los cargos públicos que falseen las cuentas u oculten datos de naturaleza contable. Aunque no se prevé pena de prisión para este nuevo delito, la vicepresidenta ha recordado que se establece una multa y que esta, "si no se cumple, se sustituye por la pena de prisión".

La Administración tendrá obligación de contestar a los ciudadanos
Cada ministerio y cada dirección general deberá hacer públicos todos sus contratos y los salarios que perciben los integrantes de su equipo directivo. Esa información estará accesible en las páginas web de cada ministerio y centralizada en un portal destinado a ese fin.  Además, los organismos de la Administración tendrán la obligación de contestar a los ciudadanos que pidan información sobre el destino de un fondo público determinado.

José Manuel Romay Beccaría , nuevo presidente del Consejo de Estado
La vicepresidenta del Gobierno ha anunciado, por otra parte, el nombramiento del exministro de Sanidad José Manuel Romay Beccaría como nuevo presidente del Consejo de Estado, en sustitución de Francisco Rubio Llorente.

José Manuel Romay Beccaría ha ocupado, entre otros cargos, los de conselleiro de Sanidad y de Agricultura de la Xunta, de la que también ha sido vicepresidente, así como el de ministro de Sanidad en el primer Gobierno de José María Aznar. Además, ya fue presidente del Consejo de Estado entre enero de 2003 y abril de 2004, cuando fue relevado por Rubio Llorente, al que ahora sustituye.