En pleno terromoto político por el adelanto electoral al 23 de julio por parte del Gobierno de Pedro Sánchez, las primeras guerras internas han comenzado a sucederse, y no precisamente entre Sumar y Unidas Podemos. Los resultados de las elecciones autonómicas y municipales del pasado 28 de mayo no solo han llevado al presidente del Ejecutivo a acelerar el fin de la legislatura sino a otras formaciones a tomar decisiones importantes. Una de las más llamativas ha sido la de Ciudadanos, que ha dado un paso atrás a la luz de la debacle y no se presentará a los comicios nacionales. Una huida política que conllevará la desaparición de este espacio y que ha sentado especialmente mal a Edmundo Bal, coportavoz del grupo parlamentario en el Congreso. El todavía dirigente ha cargado con dureza contra la cúpula naranja, a la que ha tildado de "cobardes" y ha acusado de dejar a miles de votantes "huérfanos" al tiempo que ha pedido su dimisión "en bloque". "No voy a callarme", ha advertido en declaraciones a ElPlural.com antes de apuntar a los nuevos intereses de la dirección con el Partido Popular.

Bal, muy duro con Ciudadanos

El Comité Nacional de Ciudadanos comandado por Adrián Vázquez anunciaba en la tarde de este martes su decisión de no concurrir a las elecciones generales del próximo 23 de julio bajo el argumento de que los españoles no les considera "como una alternativa política transformadora" tras su borrado de las instituciones en los comicios del 28M. "Lo que hacemos ahora es rearmar el espacio liberal y lo que tenemos que hacer es hablar con los nuestros y empezar a construir para el próximo ciclo electoral (…) Aquí seguiremos dando la talla para poder ser una fuerza decisiva en el futuro de España", ha sostenido en una comparecencia de prensa junto a la portavoz nacional del partido, Patricia Guasp.

No estuvo presente, sin embargo, Inés Arrimadas ni Edmundo Bal. Precisamente este último se ha mostrado "muy enfadado" ante esta decisión, que da vía libre al PP de Alberto Núñez Feijóo de deja "a miles de votantes huérfanos". "Entre ellos yo. Mi partido me ha dejado huérfano", ha sostenido este miércoles en una entrevista en el 24H. El coportavoz del grupo parlamentario naranja en el Congreso de los Diputados ha acusado a la cúpula de Alcalá 253 de "cobardes" por huir de la carrera electoral. "Las elecciones generales son las mas importantes a las que se presenta un partido de ámbito nacional", ha afirmado antes de apuntar a que no se trata de "ganar o perder".

"Se trata de tener un debate en RTVE y explicar el programa", ha añadido para después sostener que "no hay que tirar la toalla" a la luz de la trayectoria de la formación. En este contexto, Bal ha aprovechado para recordar "lo ocurrido hace años en Barcelona", cuando se "levantaron contra en nacionalismo" y ganaron en las urnas. Pero también ha deslizado fuertes críticas a los naranjas, a los que ha afeado haber dado la sensación de ser "un partido de derechas". "Si hubiésemos sido un partido de centro de verdad, en estas elecciones nos hubieran votado", ha explicado al tiempo que ha querido recordar el objetivo inicial de esta organización. "Vinimos a la política para acabar con el bipartidismo, no para aliarnos con él como estamos haciendo ahora", ha afirmado.

Cs da carta blanca al PP

Pero el hasta ahora diputado por Madrid también ha dejado caer otras intenciones de la directiva con esta decisión, como "guardarse el dinero que hay en la caja para presentarse a las elecciones Europeas" del año 2024, en referencia directa a Vázquez o dar carta blanca al PP. Todo con un dardo a Inés Arrimadas, la que fuera secretaria general de la formación en sustitución de Albert Rivera y portavoz de las siglas en la Cámara Baja. Según sus informaciones fue precisamente ella la que puso encima de la mesa la opción de no presentarse el 23 de julio, lo que a su juicio "no es una solución". "Es un cierre, es buscarse la vida en el Partido Popular", ha manifestado.

Con todo, Bal ha confirmado que va a seguir en la pelea y que no se irá de Ciudadanos. "Todas las opciones están abiertas y yo me voy a quedar aquí. Las personas que tenemos voz en este partido tenemos que seguir peleando para representar a los 300 mil votantes que nos eligieron en estas elecciones", ha sostenido. Y es que el dirigente ha dejado claro que "no comparte esta decisión", que "deja en la estacada a valientes" que se sumaron al proyecto, mientras ha criticado que el argumento esgrimido sea la necesidad de hacer un "rearme" cuando hace tan solo unos meses que los naranjas llevaron a cabo una refundación. Por eso, les ha exigido dimitir "en bloque" ya que está "mal dirigido".

Ya este martes, solo unos minutos después de conocer la resolución de Ciudadanos de la boca de Vázquez, Bal ha dejado clara su postura al respecto. Una resolución que ha calificado de "atropello" al tiempo que ha asegurado sentir "vergüenza". Y es que el coportavoz del grupo parlamentario ha expresado su malestar a través de varios mensajes en su perfil oficial de Twitter, donde no solo se ha pronunciado en estos términos sino que ha apuntado a unas presuntas intenciones de incorporarse al PP. "Pues a mí que ni se molesten en llamarme. La respuesta es NO Igual a otros de los citados sí les viene bien. Hombre, sobre todo, verdad, después de tomar la decisión de no presentarse. Como ya no nos presentamos, pues ya puedo ir en otra lista no? En cuál? Adivinen", ha dicho en otro tuit.

También en declaraciones a ElPlural.com el coportavoz ha manifestado que esta decisión responde al objetivo de "asegurarse el futuro" precisamente en el Partido Popular. "Yo lo veo claro", ha admitido. Minutos después, ya durante su intervención en 24H, ha afirmado que "ya no hay nada que hacer" debido a los plazos que se manejan pero sí ha reconocido que el espacio de centro "es grande" en nuestro país y que los pactos del PP con Vox harán que los populares se escoren hacia la derecha y dejarán "de nuevo" ese espacio. Ahora "todas las opciones están abiertas" y no descarta impulsar una nueva plataforma política junto al procurador de Ciudadanos en las Cortes de Castilla y León, Francisco Igea, que también ha defendido su posición.