Se acabó el debate y el tiempo de Ciudadanos. Este 30 de mayo, el presunto centro político en España sigue vacío. El Comité Nacional ha hablado y se ha ratificado la defunción del partido que, nueve años después de su asalto a la política nacional, no concurrirá a las elecciones del próximo 23 de julio. Este pasado 28 de mayo fue el último clavo que faltaba por apuntalar en el ataúd naranja, que se ha quedado sin representación en los territorios donde a tientas resistía la deriva del 10 de noviembre de 2019. Fin de ciclo en Alcalá 253.

Y es que la formación comandada por Adrián Vázquez entiende que los españoles “no les ven como una alternativa política transformadora”, tal y como ha quedado patente en las elecciones autonómicas y municipales. “El espacio liberal no ha sido lo suficientemente atractivo” en los últimos comicios, ha reconocido el encargado de dar la noticia, por lo que, a la vista de los resultados “la forma más inteligente de defender las ideas y el espacio liberal de España de cara a las elecciones del 23 de julio es que no concurramos al nuevo ciclo electoral”.

“Ahora que Sánchez vuelve a plantear el mismo plebiscito que hemos vivido el 28 de mayo a nivel nacional, también hemos llegado a la conclusión de que a día de hoy los españoles no nos ven como una alternativa política transformadora (…) No es una buena noticia para nosotros ni para los miles de liberales que hay en España y en Europa”, ha señalado.

Ciudadanos resiste (de momento)

No es el fin de Ciudadanos -al menos de momento-. Así lo ha dejado claro el encargado de aportar la información, quien ha preferido hablar de alto en el camino para llevar a cabo un “rearme” a partir y después de las elecciones del 23 de julio en lugar de hacer cualquier alusión a una todavía hipotética desaparición.

“Desde ya nos ponemos a operar en un proyecto reforzado (…) Quiero enviar un mensaje a nuestros simpatizantes y votantes”, ha subrayado Vázquez mientras daba las gracias al “trabajo” de “todos” los que han estado y se encuentran en la actualidad junto al partido naranja: “El espacio liberal sigue siendo fundamental y quiero recordar que mantenemos representación en el Parlament de Cataluña, en el País Vasco, en las Cortes de Castilla y León”.

A ellos, a los votantes y a los afiliados les han mandado el mensaje de que esto no es el fin sino el principio de algo: “Hoy empieza todo. Conocemos que partidos como el nuestro, en ciclos electorales con una polarización tan extrema sufren, pero sé también de partido que han estado en esa situación y que hoy están gobernando países como Alemania o como Bélgica. En julio haremos un gran encuentro nacional de nuestro espacio porque no vamos a perder ni un segundo para volver a representar a los españoles que no quieren extremos, que no quieren la situación que estamos viviendo a nivel nacional y que no quieren a Vox en las instituciones”.

A preguntas de los periodistas, el Comité Nacional de Ciudadanos ha dejado claro que los afiliados tienen “plena libertad de voto” de cara al 23J. En otro orden de cosas, los naranjas no han hablado de coaliciones o similares con el PP u otra formación de derechas. Por el contrario, han defendido que la decisión de cara a los próximos comicios viene únicamente motivada con el objetivo de que “el centro liberal vuelva a ser decisivo en la transformación del país”. “Y ese espacio solo lo puede representar Ciudadanos”.

Por último, Vázquez ha mantenido que la marca resiste: “Lo que hacemos ahora es rearmar el espacio liberal y lo que tenemos que hacer es hablar con los nuestros y empezar a construir para el próximo ciclo electoral (…) Aquí seguiremos dando la talla para poder ser una fuerza decisiva en el futuro de España”.

Desde la debacle de noviembre de 2019, que llevó a dimisión de Albert Rivera, Ciudadanos ha ido acumulando fracasos en las distintas citas electorales de los últimos años. Los comicios autonómicos y municipales del domingo supusieron otro duro varapalo ya que no lograron representación en ninguna de las autonomías en liza y perdieron casi todos sus concejales de hace cuatro años.

Ni siquiera la portavoz nacional del partido, Patricia Guasp, consiguió revalidar su escaño en el Parlamento Balear y también la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, se quedó sin acta.