El Partido Popular ha vuelto a caer en una nueva contradicción, esta vez a cuenta de las cartas bomba enviadas a varios miembros del Gobierno de Pedro Sánchez el pasado mes de diciembre. En los últimos días se ha dado a conocer la identidad del presunto autor de los envíos, entre los que destacan varios dirigidos directamente a Moncloa y a la ministra de Defensa, Margarita Robles. Se trata de un hombre de 74 años, originario de Miranda de Ebro (Burgos), que es "nostálgico" de la URSS. En el momento que salieron a luz estos paquetes, que se hicieron llegar de forma masiva a distintos puntos estratégicos, el PP puso en entredicho y ridiculizó su veracidad, sin embargo, ahora se mantiene callado al conocer su simpatía con la extrema izquierda.

El origen de las cartas bomba

Este miércoles ha saltado la noticia de que la Policía Nacional ha detenido a un hombre como presunto autor de los envíos de sendas cartas bomba a varios miembros del Gobierno de Pedro Sánchez. En concreto, estos fueron dirigidos contra el propio presidente en Moncloa, el Ministerio de Defensa, la base militar de Torrejón de Ardoz, las Embajadas de Ucrania y Estados Unidos y una empresa armamentística de Zaragoza entre finales de noviembre y principios de diciembre. Según las informaciones, el detenido -acusado de un delito de terrorismo- es un hombre de 74 años de Miranda de Ebro, en Burgos.

Lo llamativo es que este jubilado, que ya ha pasado a disposición judicial de la Audiencia Nacional por los seis paquetes, no es un espía del Kremlin, como en un principio se pensaba. De hecho, la hipótesis principal que se manejaba desde el primer momento era que estos sobres con explosivos estaban siendo enviados contra el Ejecutivo y otras instituciones por el apoyo a Ucrania ante la invasión de Rusia. Ahora se sabe que 'Unabomber', como se le conoce en las redes sociales, es un "nostálgico" de la URSS. Una ideología cercana al Gobierno de Vladimir Putin pero que no responde directamente a su encargo, como en un principio se planteó como castigo a nuestro país.

El PP puso en duda su veracidad

Entonces el Partido Popular ridiculizó este suceso e incluso puso en duda la veracidad de los sobres, siguiendo la estela de la ultraderecha de Vox. Una de estas voces populares fue la de la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien puso el foco en el origen. "Una carta bomba que resulta que tarda una semana en contárselo a Interior. Un poquito raro, ¿no? Como las navajitas plateadas, no te digo más", afirmó con tono burlesco en una intervención en el programa Al Rojo Vivo de LaSexta a principios del pasado mes de diciembre. De esta forma, la exlíder del PP madrileño hacía referencia a las navajas ensangrentadas que recibieron diferentes ministros como Reyes Maroto o Fernando Grande-Marlaska en las semanas previas a las elecciones en la región liderada por Isabel Díaz Ayuso de 2021.

Por su parte, el portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Iván Espinosa de los Monteros, pidió "máxima cautela" hasta que se supieran "a qué se deben" estos paquetes debido a los "antecedentes" de Sánchez. "Como tenemos antecedentes de lo que hace este Gobierno con la recepción de cartas con navajitas, con balas, vamos a adoptar la máxima cautela hasta que sepamos exactamente a qué se debe", aseguró en declaraciones desde la Cámara Baja. 

Ayuso cuestionó Pegasus

Esta postura negacionista también fue manifestada por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en otro caso de ataque al Ejecutivo: los espionajes con Pegasus. El pasado mes de mayo, Ayuso puso en cuestión que se hubieran intervenido los teléfonos del presidente y de la ministra de Defensa y aseguró que no descartaba que salieran a la luz "conversaciones comprometedoras para la oposición". "Navajita plateá ha vuelto en forma de whatsapp", añadió Ayuso para ridiculizar la situación.

"La imagen que estamos dando es desastrosa y el daño que se le está haciendo al CNI, entre otras instituciones, es irreparable. No descarto, esto es una valoración mía personal, que en un futuro aparezcan conversaciones comprometedoras no para el presidente ni para su Gobierno pero sí para la oposición. No descarto que, en el futuro, el móvil de Feijóo o el mío o el de algunos líderes del PP o de Vox o de Ciudadanos, de personas que podemos ser su alternativa, aparezcamos en los medios de comunicación con todo lujo de detalle mientras no se sabe del Gobierno absolutamente nada", aseguró la lideresa.

A Ayuso le pareció "curioso" que "mientras una persona que guarda hasta como secreto de Estado los viajes en Falcon para amigos y familiares resulta que ha sido espiado y te enteras un año más tarde". "Por cierto, lo explota el 2 de Mayo Bolaños antes de venir al acto -de la Comunidad de Madrid-. ¿Y esto sí lo cuentas?, ¿no cuentas tonterías y cuentas esto que es tan grave sin dar detalle? Ya veremos en qué queda", afirmó antes de hacer mención a las balas que recibió el ministro del Interior Marlaska o el entonces vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias. "Navajita plateá ha vuelto en forma de whatsapp. Ya veremos si no hay conversaciones de los demás en portadas de periódicos en poco tiempo y, por supuesto, ninguna que ponga en ningún aprieto al Gobierno y menos a su presidente, a su Sanchidad", dijo.