María Dolores Cospedal no ha dicho nada que no dijera durante la campaña electoral. Su discurso de investidura ha sido un resumen de las propuestas que a lo largo del pasado mes de mayo desgranó en mítines y reuniones electorales. La falta de concreción ha sido la nota dominante de su intervención ante las Cortes de Castilla-La Mancha, que ha despachado en menos de una hora.

La culpa, de la crisis
La presidenta electa de Castilla-La Mancha ha reconocido que hasta que “las cuentas no estén saneadas” no habrá bajada de impuestos, aunque, eso sí, ha situado en el ecuador de la legislatura la aplicación de esta medida que tanto reivindicó en campaña electoral. Cospedal ha achacado a la crisis y a la situación económica y financiera de la Junta de Comunidades el “retraso” en la aplicación de sus promesas, que pasan también por el “aplazamiento” de la ejecución de infraestructuras, prometidas igualmente en la pasada campaña electoral.

La “tele” tendrá que esperar
Aplazamientos, “peros” y condiciones que dejan en el aire otras promesas. Cospedal ha vuelto a recordar su intención (solo intención) de privatizar la televisión autonómica, si bien ha obviado que para llevar a cabo este proceso es necesario cambiar la ley de entes públicos y contar con la aprobación del Congreso de los Diputados. Maríano Rajoy dijo estar dispuesto a cambiar la normativa y dejar a las comunidades libertad para privatizar o no sus canales autonómicos.

Menos altos cargos…
Lo que sí podrá hacer Cospedal, como así lo ha anunciado, es reducir el número de altos cargos de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que pasarán de 35 delegados provinciales a 5 y de 52 directores generales a 22, además de  reducir drásticamente los puestos de libre designación.

…y menos descentralización
María Dolores Cospedal ha presentado una batería de medidas más efectistas que efectivas, sin apenas incidencia en el ahorro presupuestario, como son la supresión del Defensor del Pueblo, Consejo Económico y Social y Tribunal de la Competencia (en este departamento solo trabajan dos personas), al mismo tiempo que anunciaba su intención de pedir al Estado que se haga cargo del trabajo que desarrollan en Castilla-La Mancha estos departamento que pretende eliminar.

Otras medidas
El discurso de Cospedal no ha distado mucho del que exhibe su mentora política, Esperanza Aguirre. Tanto es así que la que será el miércoles presidenta de Castilla-La Mancha ha hablado de declarar los toros como bien de interés cultural, designación del profesorado como autoridad pública, ley de calidad educativa, enseñanza bilingüe y otras medidas aplicadas desde hace tiempo en Madrid, comunidad con la que pretende suscribir convenios sanitarios.

Los héroes del incendio
Lo que no ha gustado a los socialistas ha sido la utilización, una vez más, de las víctimas del incendio de Guadalajara de 2009 donde murieron 11 personas de un mismo retén. Cospedal ha dicho que su primer acto institucional como presidenta será reunirse con los familiares de esos “héroes”  para mostrarles el reconocimiento que no han tenido de la región. Y lo ha dicho en presencia de la madre de uno de los fallecidos, la consejera de Educación y Cultura de Gobierno en funciones de José María Barreda.

Ni agua ni ATC
Los socialistas, que están convencidos de que Cospedal no ha dado a conocer todavía su programa oculto, han lamentado que la presidenta electa de Castilla-La Mancha haya dedicado solo “treinta segundos” al agua y no haya dicho “ni una sola palabra” acerca del cementerio nuclear, ha reconocido a ELPLURAL.COM el nuevo portavoz del grupo del PSOE, José Luis Martínez Guijarro.