El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha eludido responder a los medios de comunicación que le han esperado, este jueves, a su llegada a un Desayuno informativo de Europa Press en Sevilla, en el que participa junto al delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz Cabello.

En medio de la polémica que ha levantado por señalar al juez que emitió el voto particular en la sentencia de La Manada, Rafael Catalá ha optado por guardar silencio, cuando los periodistas le han abordado esta mañana.

Muchas miradas están puestas hoy sobre el ministro de Justicia, que a las 13.30 estará en el acto de entrega de Condecoraciones de la Orden de San Raimundo de Peñafort, en la sede de la Delegación del Gobierno. Su agenda en Sevilla también incluye la Conferencia Española de Decanos de Facultades de Derecho, en la Universidad de Sevilla, a las 16.30.

Catalá señaló al magistrado que absolvió a La Manada
El lunes pasado, el ministro de Justicia señaló abiertamente al juez del voto particular de la sentencia de La Manada, que pidió la absolución de los cinco acusados, Ricardo Javier González, de quien afirmó que “todos en la carrera saben que tiene un problema singular".

Rafael Catalá llegó a cuestionar al Consejo General del Poder Judicial por “no actuar preventivamente” contra el magistrado, y llegó a poner en cuestión las “plenas facultades” del juez “para ejercer su labor".

Desde el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) el vocal Juan Manuel Fernández  aseguró que "no había ningún motivo" para actuar contra el juez. "El Consejo no ha actuado porque no ha habido ninguna actuación disciplinaria contra el magistrado González", afirmó.

Críticas al ministro desde los frentes judicial y político

Las críticas a Catalá llegaron tanto desde los partidos políticos como del ámbito judicial. El secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, afirmó que sus palabras demuestran "poco respeto por la separación de poderes" y suponen "señalar" a un juez. Villegas ha indicado que lo que debería hacer en este caso un responsable político, sobre todo si se trata del ministro de Justicia, es proponer cambios legislativos concretos, "no señalar a jueces, atacándoles directamente", ni "interferir en el trabajo" del CGPJ.

La portavoz adjunta de Unidos Podemos en el Congreso, Ione Belarra, exigió la dimisión o el cese inmediato del ministro de Justicia por "inmiscuirse" en el Poder Judicial al haber cuestionado al juez.

La asociación judicial progresista Jueces para la Democracia pidió "rigor" al ministro a través de Twitter: "Se descuelga con 'problemas particulares' que ni conoce, ni constan acreditados, ni sabemos de dónde se los saca".

El portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), Celso Rodríguez, indicó que el ministro "debería ser más prudente a la hora de lanzar este tipo de juicios de valor subliminales porque, entre otras cosas, no es competencia del Ministerio de Justicia".

La presidenta de Foro Judicial Independiente, Concepción Rodríguez, dijo que la conducta de Catalá es "absolutamente reprochable".

El portavoz de la Asociación de Jueces y Magistrados Francisco de Vitoria (AJFV), Raimundo Prado, tildó de "muy graves" las afirmaciones del ministro. "Es incendiario e irresponsable y si hubiera algún tipo de cuestión corresponde al CGPJ tratarlo. Se trata de una violación de la independencia judicial".

Jueces y fiscales pidieron la dimisión de Catalá
Las siete asociaciones de jueces y fiscales exigieron en bloque la dimisión del ministro de Justicia por sus declaraciones. En un comunicado conjunto, las cuatro asociaciones de jueces y tres de fiscales consideraron que las manifestaciones de Catalá representan una intromisión del Gobierno en las resoluciones judiciales, cuando, a su juicio, simplemente se debería limitar a "respetar y velar por el respeto del funcionamiento de las instituciones".