A pesar de que la trama Enredadera se extendió con especial virulencia por Castilla y León, hay un personaje asturiano recurrente en los pinchazos telefónicos a los que ha tenido acceso ElPlural.com: Francisco Álvarez Cascos. Y lo es por la “íntima amistad” que según uno de los empresarios al frente de la trama, Ángel Luis García, El Patatero, ambos mantenían. Sin embargo, García no tiene reparos en contar lo que el exvicepresidente de José María Aznar le confiaba en sus encuentros: “Dice que Rajoy era un mindundi” y que el PP “ya está todo podrido”.
Es lo que contiene una larga conversación de mayo del 2017 que El Patatero mantiene con Octavio Llamas, en aquel momento presidente de Marcas de Restauración y miembro de la Junta Directiva de la CEOE, la patronal española. El Patatero le llama para comentarle dos cosas: que tiene un plan para que Llamas pueda ser “presidente de la Cámara de Comercio de Madrid” y “por el otro lado, una oportunidad de negocio”. Y, aunque Llamas le pide que “lo segundo no se lo cuente por teléfono”, el resto de la conversación pinchada versa sobre esa oportunidad, que pasa por reunirse con Francisco Álvarez-Cascos.
El Patatero le cuenta a Llamas que “ha hecho muchísima amistad” con Álvarez-Cascos y que ahora es “íntimo amigo suyo”. Que dos días antes “estuvo con él y su mujer toda la mañana en su despacho de Madrid, que hoy le ha llamado tres veces y que le cuenta unas cosas que le queda grandísimo”. “A mí no”, presume Llamas, que le pide enseguida que organicen “una comida” con Álvarez-Cascos para que le pueda conocer.
“Rajoy era un mindundi”
Pero antes de entrar en negocios, El Patatero le cuenta a Llamas varios intríngulis políticos que le ha contado Álvarez-Cascos, “un tío que ha estado 25 años en la primera línea, vicepresidente del Gobierno de España, secretario general del partido, eh, la hostia”. Cascos le habría dicho a García “que cuando sale Fraga, Aznar y él han hecho toda España entera, y que después [Rodrigo] Rato la cagó, el otro ministro tal, que Rajoy era un ‘mindundi’ que lo metieron y ahora tiene lo que tiene…, que le ha hablado mal de los ministros, que hay un nivel malísimo y una corrupción, y que de la única que le ha hablado muy bien es Esperanza…”.
No son las únicas palabras de Cascos que El Patatero traslada a su interlocutor, según la transcripción de la Policía: “Ángel Luis le dice que le dijo a Álvarez Cascos porque no hablaba con Aznar y volvían a refundar el PP, y que le contestó que segundas partes nunca fueron buenas, eso ya está todo podrido” y que a la gente que “no quieren” en el PP él “la está integrando en Foro”.
“Habrá que hacer business”
Sin embargo, El Patatero le dice a Llamas que Cascos ya no quiere “tirar” de Foro Asturias, sino “meterse en algún consejo de administración, que le quedan diez años y tiene un montón de hijos… ser legal, hacer cosas legales y trabajar para ganar un duro”. Ese parece el objeto de la llamada y de la futura comida que ambos quieren organizar. Según García, Cascos le ha pedido “entrar en algún consejo, pero que quiere que sea algo discreto, en alguna fundación por ejemplo, que ‘en vía B’ entren en obra pública pero no quiere entrar directamente en obra pública, no quiere las puertas giratorias, que lo metan y lo saquen ahí en los periódicos”.
Ante estas prerrogativas, Llamas le contesta que “le parece bien que lo quiera todo 100% legal pero que claro, a ver si me explico, donde entras tú, me estás entendiendo un poco”. Algo críptico, pero que El Patatero entiende y le responde que él “tiene sus cosas también que ya se lo explicará todo, que él está ya muy servido”. A esto, Octavio Llamas añade que “para que le entienda, que habrá que hacer business”. Algo que el agente al cargo de la transcripción traduce así: “Dejando entrever que para tocar ciertos sitios hay que hacer irregularidades”.
“Un Rolls-Royce de oro”
Ambos se muestran emocionados por la perspectiva de entablar relación profesional con Álvarez-Cascos y El Patatero le dice a Llamas que “ellos dos tienen 50 años y se pueden subir a un carro que es un Rolls-Royce de oro”. A lo que Llamas le dice que sí, pero que solo les quedan 10 años para “hacer las cosas bien” porque no quiere llegar a los 70 años sin estar en un consejo de administración. A lo que García añade que él también quiere estar “viviendo la vida con 70 años y quiere estar en el barco con él (Octavio) en Mallorca”.
Finalmente, El Patatero le dice a Llamas que se lo piense y que “quedan la semana que viene jugando al golf solos”. Algo que Llamas ve “oportuno” y le replica que “mientras le están dando a la pelota hablamos del pelotón”. Y García le asegura que, después de verse ellos dos a solas, “sentarse con él (CASCOS), quedar a comer con él no es difícil. Que lo que no quiere es quedar para reuniones de trabajo en hoteles, que las quiere en un despacho de abogados”. “No quiere el Hotel Palace donde le conocen y que al salir le pueden hacer una foto”, dice El Patatero, a lo que Llamas añade que “quedar a comer en un restaurante es normal, pero si te ven en un Hotel parece que estás conspirando”.
