“Íñigo no es Manuela. Podemos se presentará con su propio proyecto en la Comunidad de Madrid”. Así de contundente se pronunció Pablo Iglesias horas después de conocer la decisión de Íñigo Errejón de concurrir a las elecciones autonómicas de 2019 al margen de las siglas de Podemos y formando tándem con Manuela Carmena mediante la plataforma Más Madrid. El secretario general morado fue claro: Errejón se vería las caras con un candidato de Podemos. Sin embargo, tras el estallido inicial que dinamitó las relaciones entre el exportavoz y la dirección del partido, aún existen posibilidades de articular una lista unitaria, tal y como reconocen diversas fuentes de las distintas sensibilidades implicadas a ElPlural.com.

Nada más hacer el anuncio y sacudir el tablero político, las cuatro principales partes implicadas -Podemos, Errejón, Equo e Izquierda Unida- analizaron y fijaron posturas. Los bloques no tardaron en configurarse. Por un lado, los verdes se situaron del lado del candidato, mientras los de Alberto Garzón criticaron la maniobra de Errejón y apostaron por cumplir con el acuerdo rubricado con Podemos.

Ambas placas tectónicas parecían inamovibles, pero según ha podido saber ElPlural.com, se pueden producir movimientos en los próximos días (y hasta el 22 de abril, día límite para inscribir candidaturas para las elecciones del 26 de mayo).

Equo emitió un comunicado haciendo “un llamamiento a la responsabilidad”. Los verdes piden retomar las negociaciones y sentar unas nuevas bases para “concurrir juntos”: “Equo considera urgente continuar con dichas negociaciones par materializar la intención de confluir y constituir la más amplia y sólida alternativa que permita consolidar y ampliar los avances ya logrados”.

Y mientras Equo presiona, en el otro bloque, IU hace lo propio. En los pasillos del Congreso de los Diputados, Garzón ha dejado la puerta abierta a la posibilidad de renegociar una candidatura única. El líder de IU ha pedido “calmar aguas”, a pesar de que considera que se ha equivocado.

Al igual que los verdes, Garzón hace un llamamiento a la responsabilidad para construir la “unidad más grande posible” en la izquierda: “No tiramos la toalla, la verdad, pero ahora mismo es más difícil”. “La situación está en stand by”, ha insistido.

Y es que, a IU le conviene concurrir conjuntamente en una única lista puesto que, según los primeros sondeos publicados, Podemos se quedaría como fuerza extraparlamentaria en la Comunidad de Madrid y, en consecuencia, los de Garzón perderían representación en la Asamblea.

Con Equo e IU apostando por una lista unitaria y con Errejón dejando claro que quiere aglutinar a todas las fuerzas políticas y sociales de izquierdas al tiempo que se reivindica como “candidato de Podemos”, la pregunta es qué piensan los de Iglesias.Para empezar, la rueda de prensa de Íñigo Errejón ayudó a rebajar la tensión inicial. Tras las presiones de la dirección, con Pablo Echenique y Rafa Mayoral pidiendo que dejara el escaño, Errejón entregó su acta. Y lo hizo sin una sola mala palabra hacia la formación. Evitó entrar en el cuerpo a cuerpo para no contribuir al “ruido” generado a pesar de que el secretario de Organización intentó humillarle: “De algo tiene que vivir hasta mayo”. Unas declaraciones tan abruptas que Echenique ya ha admitido el error y ha pedido disculpas.

Por otro lado, Podemos no ha nombrado aún a su candidato. La lógica invitaría a pensar en Ramón Espinar, secretario general de Podemos en la Comunidad de Madrid. No obstante, todos y cada uno de los dirigentes han evitado siquiera nombrarlo.

Con Equo del lado de Errejón, IU presionando para articular una candidatura única y Podemos sin candidato, solo queda preguntarse: ¿Cederá Iglesias?