Tres días después de las últimas palabras de Isabel Díaz Ayuso sobre la guerra que se vive en el Partido Popular, la presidenta madrileña ha vuelto a hacer referencia a la situación en la que se encuentra la dirección nacional y, aunque ha descartado suceder a Pablo Casado, ha exigido "un giro absoluto" desde dentro del partido.

La presidenta madrileña ha aprovechado un acto de presentación en Boadilla del Monte para defenderse de las acusaciones y hacer un llamamiento a Génova para que tome medidas de forma "urgente": "Ahora se abre un escenario incierto. Espero que se haga pronto, porque nos estamos desangrando".

Ayuso ha hecho hincapié en que está sufriendo "un grave ataque político" y ha agradecido el apoyo de las personas que se concentraron este domingo frente a la sede del Partido Popular: "Agradezco las muestras de cariño y lamento que, con lo bien que vamos en Madrid, qué pena que tengamos que sufrir esta situación".

La dirigente autonómica ha anunciado que este lunes enviara toda la documentación sobre el contrato de Priviet Sportive con el que compró 250.000 mascarillas por 1.512.500 euros y su hermano consiguió una comisión de, al menos, 55.850 euros: "Un contrato del que tuve conocimiento un año y medio más tarde. Nadie de mi Consejo de Gobierno intervino en su adjudicación. Vamos a estar a la entera disposición de la Fiscalía".

Ayuso deja espacio a Feijóo

Mientras Ayuso hablaba ante la prensa y reclamaba a Génova que se tomaran medidas "urgentes" tras la grave crisis que se está viviendo con la dirección nacional, la presidenta madrileña ha coincidido en el mismo mensaje que mandaba el líder de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo.

El presidente gallego ha exigido, durante una intervención ante la prensa, decisiones "inmediatas y difíciles" y, pese a no revelar la postura que debería adoptar el partido y el posible adelanto del congreso, ha explicado que Pablo Casado ya "sabe mi opinión perfectamente".

Ante la posibilidad de que Feijóo pueda posicionarse como candidato a un futurible congreso nacional del PP, Ayuso se ha desmarcado de dichas opciones y ha recalcado que "mi sitio es Madrid": "La Comunidad de Madrid está por encima de los partidos. Yo nunca he pretendido sustituir a Casado. No hay una guerra entre Ayuso y Casado".

"Mi Gobierno siempre ha tenido una conducta ejemplar. Desde que soy presidenta de la Comunidad de Madrid no he dedicado ni un solo segundo de mi vida en ayudar a alguien de mi entorno. No doy ejemplo cada día para después echar esto por tierra", ha añadido.

"Alguien tendrá que tomar responsabilidades"

La presidenta de la Comunidad de Madrid ha reclamado medidas "urgentes" a la dirección nacional del PP y cree que "se tendrá que ver si hay dimisiones o no", pero asegura que "el daño que han hecho a la Comunidad de Madrid y a mi familia no puede ser gratis".

"Han llegado a vincular a mi madre en contratos. Esto es gravísimo y evidentemente yo no puedo mirar para otro lado. Alguien tendrá que tomar responsabilidades", ha señalado la dirigente regional durante el acto ante los medios de comunicación.

Ayuso ha advertido a Génova que serán ellos los que deban decidir "cuál es el siguiente escenario": "Tendrá que decidir el partido qué debe hacer y cada día que pasa vamos a peor. Hace falta un giro absoluto por el bien de España".