Suu (Barcelona, 2000) es una cantante y compositora pop. Así, tal cual. La artista ha reivindicado el papel de este género en el panorama nacional desde sus inicios en el año 2018, cuándo lanzaba su primer álbum, escrito a medias entre el catalán y el castellano. Siete años después, Suu estrenó su cuarto elepé, 'Material sensible', el pasado 14 de febrero, un proyecto que puede disfrutarse este 14 de marzo en la sala Copérnico de Madrid como parte de su gira de presentación.

En una conversación con ElPlural.com, Suu habla sobre su exploración sentimental en este proyecto, los circuitos musicales nacionales y qué significa ser una artista pop en el panorama. 

Pregunta: El pasado 14 de febrero lanzaste Material sensible. ¿Cómo ha ido su desarrollo?

Respuesta: Ha sido el disco que más tiempo me ha tomado, los demás han sido cada dos años. He querido tomarme mi tiempo con calma y descartar muchísimos temas para no ir con prisas. Aunque hoy en día todo el mundo saca cosas cada dos meses, he decidido centrarme en lanzar discos largos porque es el formato con el que más cómoda me siento. 

P: El disco tiene seis productores diferentes, pero cuando lo escuchas no se nota que haya tantas manos detrás.

R: La idea de grabarlo con tanta gente vino porque no quería casarme con una única persona a la hora de desarrollar el disco. Quería probar cosas distintas. Por eso mismo he podido tomar parte en la producción, coordinando a los que han participado y mandando a todos los hombres implicados (ríe). Todos han sido muy proactivos y el proyecto ha resultado muy colaborativo. Hemos conseguido esa unidad que buscábamos a nivel sonoro.

P: En este trabajo transicionas por todas las etapas del enamoramiento. ¿Hablas desde cómo vive el amor la Generación Z?

R: Aunque inevitablemente hable desde mi voz, también puede interpretarse como la voz de personas que estén atravesadas por las mismas circunstancias que yo, como una parte del colectivo LGTBI o algunas mujeres de mi edad. Aunque no pretendo abanderar a nadie, me encanta que la gente se identifique conmigo.

P: El remate del disco es Amor tranquil. ¿Es un mensaje esperanzador?

R: Exactamente, ese tema es sinónimo de llegar a buen puerto. Después de la montaña rusa de emociones que representan varias canciones del disco, Amor tranquil significa llegar a un lugar sano y seguro. Es una especie de objetivo final en cuánto a las relaciones se refiere. 

P: Te oía hace poco decir que desarrollar este disco te había llevado a hacerte preguntas y reflexionar. ¿Has dado respuesta a alguna?

R: A alguna sí, pero lo importante es cuestionarse las cosas y poner en duda todo lo que haces. De esta manera se encuentra el rumbo que menos te hace sufrir. Personalmente soy una persona intensa, muy sufrida, que suele tomarse las cosas a pecho. Por eso siempre busco la forma de encontrar el camino más fácil a mi alrededor.

P: ¿Es más autobiográfico que tus otros discos?

R: En todos los discos he sido muy autobiográfica, pero en este he prestado especial atención a la literatura de las canciones. Por eso se nota muchísimo más que hablo de mi vida personal en relación a proyectos anteriores.

Del despecho no se habla tanto, pero también es importante

 

P: Cantas también sobre la ira y el rencor. ¿Es importante hablar desde estos espacios?

R: Todas las emociones te pueden dar una canción. El despecho es una sobre la que no se habla tanto, pero también es importante. Es algo que también vivimos, es durísimo y muy potente. Lo encuentro muy inspirador, aunque espero no experimentarlo demasiado.

P: ¿Se conecta mejor con temáticas de desamor?

R: Si hablamos de porcentajes, hay mucha más música dedicada al desamor que al amor. La razón es que cuando estamos tristes nos apetece más estar en casa escribiendo. Cuando estamos contentos estamos en la calle, con muchos amigos, celebrando la vida. Nos cuesta más hacer canciones. Personalmente, me es muy difícil escribir canciones que no sean banales cuándo me encuentro contenta. Por eso admiro mucho a la gente que es capaz de crear buenas canciones alegres, aunque me sienta mucho más cómoda haciendo temas tristes.

P: Decías que estabas “casada con el pop”. ¿Te apetece probar otros géneros?

R: Siempre quiero y me gusta experimentar con gente nueva para ver hacia dónde me llevan estos caminos. Pero el pop es el estilo que mejor engloba todo lo que he hecho siempre. Especialmente ahora, que he perdido el miedo a decir que hago pop. Antes era un género muy denostado, pero ahora todos nos hemos reconciliado con él. Mi raíz es ese género y todo lo que haga siempre va a llevar ese apellido.

P: ¿Sentías ese maltrato al pop cuándo empezaste?

R: El pop siempre se ha colocado en un lugar muy banal. Se le ha etiquetado de simple y fácil de hacer. Pero crear melodías pegadizas es algo complicadísimo, digno de admirar. Cuando empecé a sacar canciones, se me ponía en menor valor por el hecho de hacer pop, pero ya no es así.

P: Precisamente te has inspirado en el pop de los 90 y 2000 para Material sensible.

R: Sí, este disco lleva muchos ingredientes de ese momento. En anteriores proyectos también se notan, pero para Material sensible me he apoyado especialmente en esas décadas. He estado escuchando muchísimo a artistas como Julieta Venegas o Coti. ¿Te acuerdas?

P: Me encanta Nada fue un error.

R: Exacto. Esas melodías inevitablemente me vienen la cabeza y el disco lo había pensado de esa forma. Me he centrado más en la figura del cantautor que trae las canciones de la banda, que al final es lo que lo que hago yo en el disco.

P: ¿Qué te apetece hacer ahora?

R: Tengo muchas ganas de encerrarme en el estudio para hacer colaboraciones con gente, que es algo que no he hecho mucho en mi carrera. 

Nos obligan a ser 'pick me' para entrar en los festivales

 

P: ¿Algún nombre en concreto?

R: Me encantaría juntarme con Ginebras. También me gusta mucho lo que están haciendo Walls o Hens, esta nueva onda. Las Shego también. 

P: Desde tu primer disco han pasado siete años. ¿Cómo se mantiene una en la industria?

R: Lo más complicado es mantenerse, y con cada disco que sacaba me daba un poco más de miedo no dar con la fórmula correcta, pero vivir con esa angustia es contraproducente. Por eso intento aparcarla y seguir haciendo lo que me gusta y lo que es más honesto conmigo misma. Esa es la mejor forma de conectar con la gente.

P: ¿Hay más barreras como mujer artista en el género?

R: Es muy complicado encontrar una mujer siendo cabeza de cartel en cualquier festival de España. Tienes que llevar muchísimo tiempo en la industria para que se valore, y eso es un obstáculo que abruma mucho. Eso provoca que no haya apenas espacio. Por ejemplo, si Las Ginebras tocan en un festival, ya pueden ir las Cariño o Amaia. Nos van compensando de ese modo. Es terrible, porque con los hombres no ocurre. 

P: Parece que solo hay una plaza y todas tenéis que pelear por ella. 

R: Sí. Nos obligan a ser pick me, para entrar a los festivales. Me parece absurdo. Queda mucho camino aun en ese sentido.

Súmate a El Plural

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio