Llevaban tiempo dándole vueltas a la idea y tienen muchos motivos. Eso nos contaron Luis Solano, Santiago Tobón, Enrique Redel, Diego Moreno y Julián Rodríguez, editores de Libros del Asteroide, Sexto Piso, Impedimenta, Nórdica y Periférica, respectivamente, y miembros todos ellos del grupo de editores Contexto. Acaban de presentar un Mapa de librerías de Madrid, una iniciativa que esperan extender pronto a otras ciudades como Barcelona, Valencia o Bilbao. La sacan ahora como antesala al día de las librerías y lo hacen, como decíamos, por varios motivos: devolver algo a esos libreros que han apostado por sus sellos y por otros similares en un momento especialmente complicado; invitar a disfrutar de las librerías como espacios de cultura, pero también de ocio y de turismo; reivindicar el libro en papel por medio de sus puntos de venta; pero sobre todo situar a las librerías, ese lugar donde el lector se encuentra por fin con el libro, como centro de la industria editorial.
El mapa, con el diseño sencillo y cuidado al que estos editores nos tienen acostumbrados, es un desplegable de las calles del centro de Madrid con 122 librerías marcadas. El territorio acotado es amplio, Barrio del Pilar por el norte y Vallecas por el sur, y además tienen pensado ampliarlo en futuras ediciones a barrios periféricos y municipios limítrofes de Madrid. Se trata de librerías literarias que apuestan por sellos culturales e independientes. En la parte posterior del mapa aparece una ficha de cada una de ellas con su nombre, dirección, horario y especialidad. Y es que la vocación de este artefacto es ser útil a los consumidores del libros, proporcionarles una hoja de ruta para ir de librerías en la ciudad, y también servirles de recordartorio, visibilizar estos espacios y colocarlos en en el escenario posible del ocio y el turismo.
Estos editores, que se convirtieron en un grupo hace siete años y han crecido juntos con cada uno de sus sellos, aseguran en su declaración de intenciones: "Conocemos y valoramos los distintos oficios del libro, y por eso cuidamos a quienes los llevan a cabo: traductores, maquetadores, correctores, diseñadores…, hasta llegar al distribuidor y el librero. Estos sectores no pueden estar enfrentados nunca. Abogamos por la complicidad, por el entendimiento, por las causas comunes." Este principio es sin duda el que rige esta iniciativa. Tal y como afirman ellos mismos, se sienten interpelados por el momento que vivimos y han decidido dar un paso adelante como artífices del discurso cultural, creando un vínculo con los libreros, haciendo visible esta red de librerías, para así cuidarla y protegerla, y favoreciendo la creación conjunta de un tejido para la difusión de la literatura.
(De izquierda a derecha Luis Solano, Santiago Tobón, Enrique Redel, Diego Moreno y Julián Rodríguez.)
