En una época demasiado sometida a cambios y a involuciones, cuando la gran mayoría de los críticos oficiales de los suplementos de cultura ya no cuentan con la credibilidad de antaño, los prescriptores de los blogs cierran o abandonan sus bitácoras y los lectores condensan sus reseñas y sus recomendaciones en un tweet, se agradece leer una compilación rigurosa y competente de críticas y prólogos de Robert Saladrigas, sin duda uno de los mejores analistas literarios de este país, cuyos textos pueden leerse en el diario La Vanguardia.


De un lector que cuenta, que lleva el subtítulo Impresiones sobre la narrativa extranjera contemporánea. De Thomas Mann a Jonathan Franzen, es una selección de sus colaboraciones para el citado periódico y para Círculo de Lectores, que sirve como guía de la literatura traducida actual. Saladrigas se ha orientado por el talento de los escritores reunidos, pero también por sus gustos personales. Así, el libro acaba siendo una declaración de intenciones (como una "biografía de lector"), pero también un manual utilísimo para adentrarse en el panorama de algunos de los mejores libros de los siglos XX y XXI, un mapa que ayuda a descubrir los títulos que uno no ha leído aún y que merece la pena que rescatemos.


Todos estos textos se rigen por el rigor analítico y la erudición literaria de Saladrigas. Pero ambos no serían nada (o sí lo serían: academicistas) sin algo imprescindible cuando uno recomienda sus lecturas favoritas: pasión. Podemos afirmar que el escritor nos contagia su pasión. Que nos obliga a levantarnos, a ir al ordenador y entrar en Google para comprobar si aún venden ese libro del que habla con entusiasmo, para mirar cuántas ediciones hay y si podemos conseguir la traducción que él aconseja.


Pero aún no he mencionado lo más importante, lo que un lector de esta clase de compilaciones busca: la lista de elegidos que aparece en el índice. Admito que es lo primero que me convenció para llevarme el volumen a casa: la consulta de ese índice, del que sólo citaré a unos cuantos para no atosigar este espacio con un exceso de nombres. Saladrigas analiza algunas obras de Robert Musil, Hans Lebert, Thomas Bernhard, Max Frisch, Henry Roth, Giorgio Bassani, Bohumil Hrabal, W. G. Sebald, Pierre Michon, J. M. Coetzee, Gao Xingjian, William Gass, Cormac McCarthy, Don DeLillo, Denis Johnson, Tobias Wolff, Adam Haslett, Michel Houellebecq y Karl Ove Knausgard, entre otros muchos. Delicioso, ¿verdad?


La mirada de Saladrigas, siempre abierta a las fronteras y siempre dispuesta a encontrar nuevos pliegues de significado en cada obra, se mueve con soltura y paciencia de cirujano por joyas como El ruido y la furia, Los anillos de Saturno, Desgracia, La montaña del alma, No es país para viejos, Sábado, La presa o El mapa y el territorio.