Es la patrona del trap español. Un mujer que ha hecho suyo un mundo dominado por hombres. Con actitud, chulería, calle, sensualidad, clase, raza y belleza, La Zowi (París, 1993) tiene bajo las suelas de sus tacones patriarcado cultural. Y mientras tanto, ha abierto la puerta a todas sus hijas para que se cuelen en la escena. Acaba de lanzar La Reina del Sur, su álbum más ambicioso. 45 minutos, pocas colaboraciones. Una manera de expresar que sigue siendo La Zowi, putas.

Pregunta: Anoche hiciste sold out en La Riviera (la entrevista se hizo el 25 de mayo).

Respuesta: Estoy súper contenta y agradecida.

P: Estarás cansada.

R: Llevo un tute que se va notando. Pero bueno, está bien.

P: ¿Qué haces después de un concierto?

R: Voy a tomarme algo con mi equipo, que hay mucha gente involucrada. Algunos compromisos, ver a gente. Poco más.

P: Muy tranquilo todo. 

R: Hay que calmarse ya.

P: La Reina del Sur. Centrándome en la portada, me ha dado bastantes vibes de película épica medieval. Tipo Conan. 

R: Son unas fotos que sacamos con Sita Abellán, una artista con la que llevaba tiempo queriendo trabajar y que me encanta lo que hace. El concepto fue idea suya tras explicarle qué quería trasmitir con el disco. Al final son piezas de un puzzle que no terminas de ver hasta que ya lo tienes todo completo. Y ahí observas que ha quedado muy chulo.

P: Hay bastantes canciones, pocas colaboraciones. Me ha parecido un trabajo ambicioso, personal y reivindicativo. 

R: Exacto. El tema de las colaboraciones es siempre una pregunta recurrente por la importancia que tienen. No me sentía con ganas de forzarlo. Está Soto Asa porque es mi amigo y nos encanta trabajar juntos. Al final las he elegido por el significado que tienen y no por una cuestión a nivel estratégico.

P: La Reina del Sur es también una historia de ficción sobre Teresa Mendoza, una narcotraficante. No sé si ves alguna inspiración en ella, como dos mujeres que consiguieron imponerse en un mundo de hombres.

R: Sí, Reinas del Sur hay muchas. Simbolizamos la independencia, el poder y la ambición.

P: Acabas de sacar el videoclip de Chill, donde te vemos junto a otras mujeres alrededor de una pila bautismal haciendo una especie de pócima. En plan hechiceras.

R: La brujería también está muy presente en el disco. Y cuesta decidir a qué canciones haces vídeo. Piensas qué puede funcionar, cuál es la mejor historia. Y me ha rallado bastante en este trabajo. Pero estoy muy contenta porque los temas elegidos cuentan bastante bien lo que quiero expresar. Y Chill es muy representativa.

P: Dices “nunca me he vendido, mi ganga no la he dejao, yo todo lo he joseao, no me lo han regalao”. Hablas aquí de tus principios y la importancia de no venderse.

R: La importancia de la independencia y de manterse unido. Aunque esto último... 

P: Eso es más complicado, sí.

R: Yo siento esa importancia de la unidad, pero no siempre es así.

P: También es importante manterte unido contigo mismo.

R: Total.

P: El poderío femenino también se ve en Bitch Feka, en el que trabajas con Samantha Hudson y Olivia Missy.

R: Ese vídeo es fuertote. Tiene un punto de película. Como un corto. Me gusta porque es un contenido diferente y en el que puedo mostrar una de las facetas de La Zowi.

P: En el concierto pude comprobar la juventud del público. Y su fidelidad. Lo cual significa que han crecido escuchándote. ¿Te sientes una especie de voz generacional?

R: Me cuesta verlo y considerarme así pero es algo guay.

P: ¿Crees que ayudas a las mujeres o al movimiento LGTBI a través de tu arte?

R: Es muy importante para mí. Tengo mucha fuerza a nivel de personaje e icono. Algo que va más allá de la música. Pero todo lo que hago a nivel artístico tiene que ir acompañado de algo que sirva. Me encantaría haber conseguido influir de alguna manera durante mi vida a que avancen las cosas y se abran caminos.

P: También es rompedor el haber 'robado' un tipo de lenguaje reservado para los hombres en el mundo del trap.

R: Está claro que mis letras son muy explícitas. El trap es música que viene de EEUU y es una forma de hacerlo propio. Como decir puta en vez de bitch. Al final estamos en España. 

P: En Bebe te atreves por primera vez a hablar en francés. De hecho, naciste en París.

R: Es algo que quería hacer desde hace tiempo y me lo pedían. Además, mi voz en francés es totalmente diferente. Parezco otra persona. Y quería experimentar. También desde el respeto a entrar en la escena francesa. Pero una vez me puse a ello en el estudio, conseguí mantener la esencia de La Zowi.

P: ¿Qué tal para componer?

R: Le escribí a mi hermana para que me ayudara.

P: Creciste en Granada y ahí surgió todo.

R: Flipo la de cantidad de artistas que somos de ahí a nivel urbano. Ahora ha salido Saiko, también.

P: Tiene algo místico esa ciudad.

R: Yo he viajado mucho y sigo diciendo que Granada es de las ciudades más especiales que he visto. Tiene una energía diferente. Y me sigue sorprendiendo cómo es la cuna del arte.

P: ¿Qué importancia le das al dinero? En tus canciones se puede comprobar una especia de culto alrededor de él y del consumo.

R: La apología que hago es un código del rap. Es una manera de decir que haciendo música y estando en la calle, he podido ganar dinero. Por eso de lo que nos quieren meter en la cabeza de que si no sigues ciertos patrones no vas a llegar a nada. También para reírme de la importancia del dinero. Me gusta vivir bien, valoro cada día y con dinero se solucionan bastantes cosas. Pero me río del dinero. Me doy cuenta cada día cómo puedes tener mucho pero te faltan otras tantas cosas importantes. Lo material es solo eso. 

P: Artista, icono, empresaria y madre. ¿Cómo se compagina todo eso?

R: Tiene lo suyo (ríe). Pero estoy contenta en todas esas facetas. Aunque con muy poco tiempo libre. Mi vida es mi trabajo y mi maternidad. Y guay.

P: ¿Qué ha sido lo más importante que has aprendido en estos años?

R: Hay que hacer las cosas de corazón. En el momento que no me guste lo que hago, lo dejo. Hay que disfrutar. Si no, pa' qué.