Alberdi es uno de los nombres más interesantes de la nueva escena nacional. Sin definirse en cuanto a géneros ni influencias, la artista canaria ha conseguido un sonido R&B tan poderoso como original. Capaz de colaborar con artistas de todo tipo, se acerca de la misma manera a todo el universo urbano desde su mirada pop. En aras de conocerla un poco más, Alberdi ha concedido una entrevista a ElPlural.com.
Pregunta: Eres nieta de refugiados en Moscú.
Respuesta: Mi abuela, de niña, tuvo que huir por la Guerra Civil y se la llevaron a Moscú. A mi tío, a Francia. Ella estuvo en un orfanato hasta que cumplió 18 años. Luego conoció a mi abuelo, que estuvo exiliado por ser comunista. Se tuvo que ir porque en España le iban a matar. Y estuvo en el Ejército Rojo, fue teniente. Y se llevaba con mi abuela veintipico años. Formaron una familia y al poco antes de morir Franco, volvieron a España.
P: Podrías haber sido moscovita pero eres canaria. Ahí saliste ganando.
R: Nací en Madrid y mi hermana mayor en Canarias. Pero después nos volvimos a Las Palmas con mi madre para vivir con mi abuela. Allí me he criado y años más tarde me vine a Madrid a estudiar.
P: No se vive mal allí.
R: Yo estoy súper agradecida. Aprendes cosas diferentes de la vida y forjas un carácter propio. Aprendes a ser más calmado. Y eso que yo ya venía de serie así.
P: ¿Cómo de importante ha sido Canarias para tu evolución como artista?
R: He conseguido mezclar mi formación académica en música con mi propio proyecto artístico. En Canarias siempre ha habido gente haciendo cosas muy buenas, pero faltaba cierto sentimiento de piña. Existíamos, pero cada uno estábamos a nuestra bola. Luego es cierto que ha habido artistas que me han ayudado mucho: Ricky Furiati, Choclock… Luego me vine a Madrid y ahora ya existe una escena más consolidada. Pero ha costado.
P: De las islas llevan saliendo bastantes años artistas potentes. Y exitosos. Bejo, Locoplaya, Don Patricio, Cruz Cafuné, Maikel Delacalle, Ptazeta, Quevedo…
R: Canarias siempre ha sido una referencia artística, pero es eso, faltaba que se asentaran los artistas.
P: ¿Cómo fue el proceso de pasar de la música académica a la construcción del artista?
R: Fue algo natural y fluido. Desde pequeña ya escribía mis cosas y el aprender a tocar instrumentos fue un apoyo más para cantar. Que siempre ha sido lo que me ha gustado. Luego es fácil estancarte en lo técnico y académico. A la hora de encontrar un nuevo sonido, puedes estar condicionado por lo que has aprendido. Es cierto que mis padres y mi hermana me han aportado una serie de referencias musicales, distintas entre sí, que me han servido en mi carrera.
P: En VIP se nota una gran influencia dosmilera.
R: Mi hermana me ponía mucho hip hop y dancehall. Yo nací en el 99 y en esa época yo llevaba pañales, pero crecí con ese estilo.
P: Vivimos ahora en una especie de nostalgia de esos años.
R: Sí. El texting, por ejemplo. A mí me pillo ya más en el Messenger.
P: Tu sonido recuerda a Destiny Child, uno de los grupos más importante de esos años.
R: Esa es un poco la referencia. Timbaland también.
P: ¿Te ves en este estilo, tanto estético como musical?
R: A nivel visual es cierto que tuve que indagar más, pero me veo cómoda con ello. Al final hay que gestionar bien los medios para alcanzar lo que quieres. Pero a nivel sonido, ya sea porque fuera mi música de pequeña, yo hacía estas melodías sin saber que fueran dosmileras. Las tenía en la cabeza. Me gustaría seguir dándole forma y tirar por ese camino.
P: La canción con Dollar Selmouni, Malo, fue la que cambió todo un poco, ¿no?
R: Dollar fue la mano que me ayudó cuando más lo necesitaba. Yo estaba viviendo un momento algo chungo, con un contrato musical que no me dejaba desarrollarme por ciertos asuntos legales y en ese momento contactó conmigo. Ese mismo día grabamos. Malo fue cosa de dos días. Luego grabamos el vídeo, me presentó a su gente, que hoy en día, por suerte, son mis mánagers. Yo no tenía ni temas míos.
P: ¿Consideras habitual ese tipo de generosidad?
R: En España es algo más raro que pase. Yo he tenido mucha suerte. En Sudamérica pasa mucho más. Por ello la gente nueva sale con facilidad. Y es lo que hay que hacer. De nada sirve mirar para otro lado.
P: Tengo la teoría de que, cuanto más ayudas a la gente, más te van a ayudar a ti.
R: Y ya no solo por eso. Para los pocos que somos y como está la cosa en España... Con una mínima inversión en música y cultura y poca involucración de la gente.
P: ¿Crees que en España se cuida poco al artista?
R: Si te parece caro ir a un concierto de 20 euros de un artista top de tú país… Por otros artistas de fuera se paga mucho más y tienen un caché muy alto. Pero porque se paga. Con los de aquí, nada.
P: Es que el público común creemos que los artistas nadan en billetes. No sabemos de la precariedad del artista.
R: Total. Es que no hay marcos legales que nos protejan. La gente se piensa que, porque tengas temas con millones de visitas, estás forrado. Y para nada. Además, el dinero lo vuelves a invertir en tu propia música. Y las plataformas de streaming están cada vez peor. Ahora interesan bolos. La gente tiene que ir a las salas.

P: Estás en la universidad.
R: Terminando Comunicación Audiovisual. Tengo que entregar el famoso TFG.
P: ¿De qué lo has hecho?
R: Como soy lo peor, llegué la última para elegir el tema. Y solo quedaba uno de lengua. Sobre recursos lingüísticos. Aproveché mi trabajo de VIP para relacionarlo con el lenguaje de los sms.
P: Oye lo apañaste bien. De todas formas, está bien tener una carrera para tener otras opciones de trabajo en el futuro.
R. Tengo sentimientos encontrados. Está bien para ser cámara o pasarte todo el día editando vídeos. Para eso hay que tener vocación. Y yo no tenía la suficiente como para dedicarle el mismo tiempo que a la música.
P: A ver, tiene mérito compaginar las dos cosas.
R: Tampoco es Medicina (ríe).
P: Bueno, yo estudié Periodismo y no se cantar.
R: Hay mucha gente que trabaja y estudia a la vez. Al menos he estado haciendo algo que me gusta y nunca lo vi como otro trabajo. Iba a la universidad, pero estaba pensando todo el día en música.
P: ¿Cómo llevas las redes sociales?
R: Tengo una relación de amor-odio con ellas. También notas el miedo de quedarte atrás y a mi generación le ha pillado en medio. Y me cuesta bastante adaptarme a lo nuevo. Pero es muy importante.
P: Yo veo mucha utilidad en ellas, pero son muy peligrosas. Están creando una falsa realidad y pueden convertirnos en esclavos de la imagen. Y vives atado a una red social y no disfrutas del mundo real que es lo que mola de verdad.
R: Han surgido enfermedades mentales generadas por ello. Yo he vivido de todo. Siendo pequeña, participé en La Voz Kids, también en Disney Channel, los niños están locos. Y fue la época donde más se interactuaba. Twitter, empezaba Instagram, todavía había Tuenti. Y era una locura. Al crecer e ir sacando tu propia música, ese furor ya es menor. Nunca me estresó. Hay que saber adaptarse a cada ciclo y no estresarte. Si hiciera algo más mainstream, aspiras a un público más grande. Pero el RnB no es que esté muy asentado en nuestro país.
P: ¿Qué tal es la televisión?
R: No es tan bonito como lo pintan, pero tampoco es tan feo. Fue guay por la gente que he conocido. No solo por el aspecto profesional. También he hecho amistades.
P: Supongo que no sea algo fácil gestionar de niño. Quizás puedan crearte una falsa sensación de éxito y se necesite una determinada madurez que no siempre se tienen a esas edades.
R: Igual se ha plantado una semilla de trauma en mi cabeza. Lo descubriré más adelante (ríe). Yo me lo tomé bien y conté con el apoyo de mi familia. La gente se cree que tu alrededor te está utilizando para robarte el dinero. Esto fue cosa mía. Yo quería apuntarme y llamaba a escondidas. Para mí fue un simple juego.
P: ¿Para cuándo un álbum? Ya casi ni hace falta sacarlos. Es normal ir tirando con singles, EP o mixtapes.
R: Me encantaría sacar uno. Ya a nivel conceptual. Algo que tenga cohesión. La gente es que lo quiere todo rápido. Y eso que yo empecé sacando dos EP. No saqué un disco, pero si quería algo que tuviera cierto concepto detrás. No quería sacar algo por sacar sino para que se entendiera quién soy y poder dar una estructura lógica y, a raíz de ahí, ir construyendo. Esperemos que se pueda hacer un disco más adelante.
P: ¿Cuándo se te puede ver en un escenario?
R: Ya he hecho varios, en salas pequeñas, jams... Estoy ready para lo que venga. En verano estaré en una copa cannábica el 24 de julio.
P: ¿Una qué?
R: (Ríe). Es un festival de Cannabis que se hace en Gran Canarias. Volcanna. Y ahí daré un concierto.