Con la llegada del verano, tener abiertas las puertas y ventanas puede suponer una ligera brisa que alivie las altas temperaturas que, en algún caso, se alcanzan en los hogares. Sin embargo, esto también deja la puerta abierta -valga la redundancia- a que entren pequeños visitantes que nos molesten a la hora de descansar y de relajarnos o que, incluso, estropeen nuestras cosas. Si bien es típico encontrar animales como las hormigas, también destacan las polillas, unos insectos voladores parecidos a las mariposas pero que pueden acabar con la paciencia de cualquiera, así como con nuestras prendas y tejidos favoritos.

Con el calor, estas salen de sus escondites y, al igual que una plaga de cucarachas, se cuelan en cualquier sitio fresco y resguardado que encuentren. Destacan recovecos y habitaciones oscuras, pero sobre todo lugares de los hogares como armarios, muebles de madera, la cocina, etc. En esta época es habitual encontrarse con este animal y pensar que es una bonita mariposa revoloteando por casa, pero puede ser fatal para nuestro vestuario, ya que lo agujerean y estropean con mucha facilidad. Por eso, en ElPlural.com te contamos los mejores trucos caseros para dejar fuera de casa a las polillas, más allá de las bolas de naftalina, y evitar que dañen la ropa.

Diez trucos caseros para evitar las polillas

Aunque parezca imposible, existen algunos consejos muy sencillos y fáciles para mantener a raya a estos insectos voladores tan molestos. Se trata de unos trucos caseros con los que no gastarás mucho dinero ya que, seguro, tienes muchos de los productos ya en tu despensa. Con todo, lo más importante es mantener una buena higiene para alejar a cualquier animal de nuestros objetos y estancias.

Estos son los diez trucos caseros para evitar las polillas:

1. Clavos de olor

Un remedio natural y muy efectivo es utilizar clavos de olor. Al igual que ya contamos cómo te puede ayudar para las picaduras de los mosquitos, esta especia es un gran repelente, sobre todo si se usa junto al limón. En este caso no necesitamos esta fruta, ya que por sí mismo espanta a las polillas muy rápidamente.

De esta forma, pon un puñado de clavos de olor en una bolsita o envuélvelos en un trapo de tela y colócalo en el lugar en el que queremos evitar que se acumulen estos bichos. Puedes colocarlo en esquinas de las habitaciones y dentro de muebles y armarios para impedir que se acerquen.

2. Piel de limón o naranja contra las polillas

Los cítricos funcionan muy bien con cualquier tipo de animal ya que su olor y sabor es muy fuerte y ácido para ellos. También su corteza, así que corta piel de limón o de naranja y déjalo secar un poco. Una vez han pasado algunas horas, introduce las cáscaras en una bolsa de tela y ponlo en cajones y cómodas.

3. Laurel

Como ya explicamos en los trucos para dejar lejos de casa a las hormigas, las plantas pueden ser grandes aliadas contra los insectos y sus hojas pueden ayudarnos mucho en esta labor. Esto es lo que ocurre con el laurel, cuyo olor ahuyenta a estos pequeños invasores.

Puedes intentar dos opciones: la primera es colocar ramas directamente en armarios, estantes o aparadores para evitar que entren. La otra posibilidad es elaborar un aceite de laurel infusionando sus hojas y rociarlo con un spray en puertas, ventanas y todos los lugares por donde puedan entrar y quedarse. 

4. Eucalipto, repelente natural para las polillas

Al igual que en el caso anterior, el eucalipto es un repelente natural para los bichos pero deja un gran perfume para los humanos, por lo que es una gran posibilidad. Puedes dejar las hojas directamente en tus estancias o crear un aceite de eucalipto con el que rociar los tejidos, cajones y roperos.

5. Cedro

Sí, el cedro es otro repulsivo para estos incómodos habitantes. Se trata de un árbol muy versátil y que nos da bastantes opciones. La más fácil es colocar ramas o trozos de su madera en las zonas conflictivas, pero también puedes usar perchas hechas con este material. 

Otra alternativa es comprar o elaborar aceite de cedro y colocarlo en pequeños recipientes. Sitúalos en puertas, ventanas y muebles y estos animales voladores se quedarán al margen. 

6. Especias

Como ya hemos comentado en alguna ocasión, las especias también son una grandes aliadas contra los insectos, como las polillas. Entre las posibilidades encontramos, más allá del clavo de olor, la lavanda, el tomillo, la menta, la pimienta negra o el romero

Solo tienes que rellenar pequeñas bolsas de tela con estos condimentos alimenticios y colgarlos en tus vestidores o colocarlos en cajones. La lavanda, además, te servirá como elemento aromático para tu ropa mientras otros aderezos los puedes meter directamente en los bolsillos de algunas prendas o en botes de cristal en el interior de tus muebles.

7. Virutas de lápices de madera, otra solución para mantener a raya a las polillas

Al igual que el cedro, existen otras maderas muy efectivas contra las polillas. Sin embargo, hay algunas alternativas mucho más accesibles y simples que, a lo mejor, ya tienes en casa. Se trata de los lápices de madera. 

Para ello, utiliza los restos de virutas que quedan en el sacapuntas y mételas en una bolsa de tela. Introdúcela entre tu ropa y líbrate de tus voladores visitantes.

Tal y como ya hemos comentado en unas líneas más arriba, la higiene es fundamental para evitar que cualquier animal se pueda instalar en tu casa o destrozar tus prendas. Por eso, destacamos otros tres trucos relacionados con la limpieza para mantener fuera de tu hogar a las polillas.

8. Lava tu ropa antes de guardarla para evitar olores que atraigan a las polillas

Parece obvio, pero lavar la ropa no solo es una medida de sanidad sino que evitará que los animales la estropeen. Esto es porque normalmente suelen elegir aquellos tejidos que están usados y no se han lavado, ya que los olores las atraen. Por eso, lava tu ropa antes de guardarla, prestando especial atención a que no acumule humedad y esté bien seca.

9. Aspira las alfombras y cortinas

Algunas telas son más propensas a acumular suciedad y polvo, como las alfombras o las cortinas, elaboradas con materiales gruesos y profundos. Esto es clave ya que el polvo es un atrayente decisivo para estos animales y estos componentes son muy útiles para que coloquen sus huevos. Por eso, es fundamental aspirar concienzudamente tus alfombras y cortinas, así como lavarlas apropiadamente

10. Conserva adecuadamente los alimentos

Especial atención hay que prestar a la hora de guardar tus alimentos. Las polillas pueden colarse en las alacenas, creando ahí un nido o, incluso, poner larvas en nuestra comida. Por eso, es primordial conservar ls productos en envases cerrados herméticamente, sobre todo si se guardan en muebles de madera y con fácil acceso.

Con estos diez trucos caseros podrás mantener a raya a las polillas de una forma sencilla y rápida y sin gastar nada de dinero. Se trata de productos totalmente naturales que te ayudarán a convivir en los meses de calor con algunos visitantes algo irritantes.