El verano es la época del año en la que la araña roja hace acto de presencia en los jardines y terrazas con plantas. A pesar de su nombre, no es una araña, sino un ácaro que recibe su nombre de su gran capacidad para crear estructuras parecidas a las telas de araña. El mayor inconveniente para eliminar esta criatura es su diminuto tamaño, que hace prácticamente imposible verla a simple vista y hace necesario utilizar una lupa para revisar las hojas de las plantas.

Cómo detectar las arañas rojas

Para saber este ácaro está presente en nuestras plantas, hay que centrarse en dos factores, aunque ambos aparecen únicamente cuando la plaga ya está muy avanzada. Por un lado, la colonia tiende a unirse y formar manchas de color rojo sobre las hojas. En segundo lugar, es posible guiarse por las telarañas que crean, tanto para desplazarse por la planta como para protegerse del entorno.

Además, la araña roja succiona los jugos celulares de las plantas, lo que deja una serie de señales en las mismas. La primera indicación de la presencia de este ácaro son unos puntos amarillos sobre las hojas, que en primer lugar aparecen puntualmente, y finalmente crean manchas compactas de color marrón. Si no se combate la plaga y se expanden sus efectos, las hojas de la planta se secarán y eventualmente se caerán.

Un remedio casero para eliminarlas

Una vez hemos detectado y confirmado la presencia del ácaro, podemos pasar a su eliminación. Una manera sencilla y barata de hacerlo es mediante un remedio casero. Su preparación es muy simple, ya que solo se necesitará agua y un ajo: simplemente hay que machacar el ajo y diluirlo en agua. A continuación, se distribuye el producto resultante con un vaporizador por toda la planta. De esta manera, estará protegida no solo de la araña roja, sino también de otros insectos, bacterias y hongos.

Es muy importante que esta solución se aplique de noche, ya que si se hace durante el día, los tallos y las hojas de la planta pueden resultar dañados.