La monumental Sigüenza, en la provincia de Guadalajara, es uno de los pueblos medievales mejor conservados de España. Es una villa pequeña con encanto, ideal para recorrer a pie descubriendo sus callejuelas y pintorescos rincones. Aunque es conocida sobre todo como villa medieval, los pueblos celtíberos, romanos, visigodos y árabes dejaron allí su impronta. Recientemente ha sido reconocido como uno de los mejores destinos rurales del mundo por la Organización Mundial del Turismo.

El Castillo de Sigüenza (Guadalajara) es uno de los bastiones mejor conservados y alberga en la actualidad un Parador Nacional

Sigüenza se erige en un alto estratégico desde el que se dominan los valles de los ríos Dulce y Salado. Un majestuoso castillo, convertido en Parador Nacional, domina la antigua villa. Se puede acceder libremente a la cafetería del establecimiento y disfrutar, entre otras cosas, de su magnífico patio. Se comenzó a construir en el año 1.123, sobre los restos de una fortaleza de origen musulmán. Fue concebido como palacio-fortaleza y residencia de los obispos, que fueron señores de la ciudad durante siete siglos. Ha sido residencia de casi todos los reyes de Castilla a su paso por el lugar y, entre sus más célebres huéspedes, se encuentran los Reyes Católicos, el Cardenal Cisneros, Juana la Loca, Fernando VII, Cardenal Mendoza o Doña Blanca de Borbón.

La Catedral de Sigüenza

Una joya La Catedral es de visita imprescindible. Levantada en el siglo XII alberga el sepulcro de Martín Vázquez de Arce, más conocido como ‘El Doncel’, instalado en la capilla del mismo nombre. Era un joven caballero de la orden de Santiago que murió en una batalla contra los moros defendiendo al duque del infantado.

El sepulcro, colocado sobre tres leones, está bajo una hornacina en arco de medio punto, con la estatua del Doncel en alabastro. Lo más destacado del mismo es que, en lugar de emular una figura durmiente, como era habitual, está recostado con un libro entre las manos como si lo estuviera leyendo. La iconografía habitual de la Edad Media reserva los libros a personajes eclesiásticos, por lo que su uso también puede considerarse una innovación.

Además de la capilla del Doncel, destacan las de San Marcos y Santa Catalina-Capilla de la Anunciación, el altar de Santa Librada con el mausoleo de Don Fadrique, la capilla de la Concepción, el claustro y un magnífico coro. El visitante puede disfrutar también de la belleza de los rosetones góticos de los siglos XII-XVI.

El Greco en Sigüenza

En el Museo Diocesano encontramos 'La Anunciación'una de las últimas obras de El Greco (se cree fue pintado entre 1610 y 1614). Fue pintada para la Sacristía de las Cabezas, que forma parte de la Sacristía Mayor de la catedral y también es conocida como la Capilla del Espíritu Santo o Relicario. Se trata de uno de los edificios renacentistas españoles más emblemáticos, diseñado por Alonso de Covarrubias.

Junto a la catedral está la Plaza Mayor, de estilo renacentista. Desde allí podemos dar un paseo por las calles que nos trasladará a épocas pasadas, descubriendo palacetes renacentistas y barrocos, el Barrio Humanista, la casa Plateresca, el Palacio Episcopal, el Convento de San Francisco, la iglesia de Nuestra Señora de los Huertos… 

Muy cerca está el castillo de Riba de Santiuste, que tiene la fama de ser el más terrorífico de España. La primera noticia de esta fortaleza de los siglos XII-XIII data de los tiempos de Alfonso VI, en el siglo XII, cuando lo dona al obispo de Sigüenza, Don Bernardo de Agén. En el siglo XIX las tropas francesas lo volarían durante la Guerra de la Independencia para que evitar que sirviera de refugio a los guerrilleros y recientemente ha sido reconstruido por completo.

Otros pueblos que merece la pena visitar en en los alrededores de Sigüenza son Atienza, cuyo castillo impresionó tanto al mismísimo Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, que renunció a conquistarlo: “Peña mui fuert”, dijo; y Pelegrina, en cuyo punto más alto se encuentran los restos de un castillo. Todas estas fortalezas integran la llamada ruta del Señorío de Sigüenza.

Sigüenza está muy cerca de tres espacios naturales protegidos: el Parque Natural del Río Dulce, el Lugar de Interés Comunitario del Río Salado y la Microrreserva de los Saladares del Río Salado. En el barranco del Río Dulce, a unos 14 kilómetros del pueblo, hay un mirador con espectaculares vistas del cañón

Gastronomía en Sigüenza

La gastronomía es excelente y cuenta con dos restaurantes Estrella Michelin (El Molino de Alcuneza y El Doncel) y uno destacado por la prestigiosa guía por su buena relación calidad-precio (Nöla). Como platos típicos de Sigüenza están la sopa castellana, migas alcarreñas -acompañadas de chorizo, torreznos y huevo frito-, judías con chorizo, oreja y morro, o también e su versión con liebre. En cuanto a la carne asado de cordero o cabrito, la caza (perdiz, codorniz, conejo o liebre), estofada o escabechada.