En plena temporada de vacaciones, cuando millones de personas aprovechan el verano para hacer escapadas y viajes en avión, las normas sobre el equipaje de mano vuelven a estar en el centro del debate. Las prisas, el calor y las ganas de evitar facturar pueden llevar a algunos pasajeros a tratar de subir al avión con maletas que no cumplen con las medidas permitidas.
En este contexto, Ryanair ha anunciado que estudia aumentar la comisión que reciben sus empleados por identificar maletas que superen el tamaño permitido para cabina. Actualmente, el personal cobra unos 1,50 euros por cada equipaje detectado que incumpla las normas, pero la compañía está considerando elevar ese incentivo como medida para mejorar el control.
Críticas del consejo delegado de Ryanair a los pasajeros que no cumplen con la política de equipaje
Michael O’Leary, consejero delegado de Ryanair, ha defendido esta práctica en una entrevista emitida por la cadena irlandesa RTE y de la que se ha hecho eco Europa Press: “Seguiré incentivando y recompensando a nuestro personal”, ha asegurado. Y ha sido tajante con los viajeros que no respetan las condiciones del billete: “No me disculpo por la gente que incumple nuestras normas de equipaje, seguirán pagando esas tasas de equipaje hasta que cumplan nuestras normas”.

Durante la entrevista, O’Leary ha señalado que la gran mayoría de los pasajeros cumple las normas. “El 99,9% de los pasajeros no infringen las normas y no son sancionados”, ha asegurado. Sin embargo, se ha referido de forma muy crítica al pequeño porcentaje que sí lo hace. “El 0,1% restante", al que ha calificado de ‘lacra’, es a quien va destinado esta posible solución de la 'low cost', ha dicho.
Según la normativa de Ryanair, los pasajeros pueden llevar una pieza de equipaje de mano de hasta 55 centímetros de alto, 40 de ancho y 20 de fondo. Si se supera ese tamaño al llegar a la puerta de embarque, la compañía puede rechazar la maleta o enviarla a la bodega con un recargo que puede llegar a los 75 euros.

Beneficios al alza en el último trimestre
Estas declaraciones llegan después de que Ryanair haya cerrado el primer trimestre fiscal de 2025 (de abril a junio) con un beneficio neto de 820 millones de euros. Esta cifra duplica con creces la del mismo periodo del año anterior. La compañía ha explicado que este crecimiento se debe a un aumento del 4% en el número de pasajeros, que ha alcanzado los 57,9 millones, y a un incremento del 21% en el precio medio de los billetes, que se sitúa en los 51 euros.
Por otro lado, en relación con la renovación y ampliación de su flota, Ryanair ha confirmado que espera recibir 29 aviones Boeing 737-8200 Gamechangers antes de que finalice junio de 2026. Con estas incorporaciones, la compañía confía en recuperar el ritmo de crecimiento en el tráfico de viajeros durante el ejercicio 2027, tras haber sufrido retrasos en entregas durante este año.
Actualmente, Ryanair opera con 618 aviones, todos de la marca Boeing, incluidos 181 del modelo B737-8200 Gamechangers. Desde junio de 2024 se han sumado 25 unidades de este tipo. Estos aviones ofrecen un 4% más de capacidad de asientos, un 16% menos de consumo de combustible y una reducción del 40% en el nivel de ruido, según datos de la compañía.
De cara al conjunto del año fiscal 2026, la aerolínea estima un crecimiento del tráfico del 3%, lo que supondría alcanzar los 206 millones de pasajeros. Sin embargo, Ryanair ha evitado dar una previsión concreta sobre el beneficio total del ejercicio, argumentando que hay varios factores que pueden afectar negativamente al sector. Entre ellos menciona los conflictos geopolíticos, la inestabilidad económica, las huelgas de controladores aéreos y las dificultades operativas en aeropuertos europeos.