¿Panettone o Roscón de Reyes? Desde hace tiempo, el bollo italiano ha llegado a nuestras vidas y pugna por las estanterías de los supermercados. Aunque en este caso, a diferencia de la cebolla de la tortilla de patatas, es compatible querer por igual a los dos productos. Otra cosa es que nos pueda la vena tradicional y queramos respetar al Roscón de Reyes. En ese caso, puestos a ser puristas, una opción atractiva es el Roscón de Reyes con la receta tradicional de hace un siglo.

Es lo que nos propone la cadena de restauración Rodilla, famosa por sus sandwiches, aunque nunca ha renunciado a su orígenes, en los que, además de ofrecer embutidos al corte, también tenía un obrador de repostería en su tienda original, en la plaza de Callao, que hoy sigue siendo uno de los Rodilla de la capital y el primero de los 156 que hay repartidos por toda España.

Allí fundó en 1939 el primer establecimiento Antonio Rodilla y fue donde tuvo la idea de aprovechar los extremos del fiambre y de las barras de queso que la gente ya no quería comprar para ofrecer el revolucionario -en aquella época- sandwich sobre el que se basa la cadena.

El Roscón de Reyes de Rodilla
El Roscón de Reyes de Rodilla
Y, en aquella tienda, también ofrecía los Roscones de Reyes que la cadena Rodilla sigue vendiendo y que ya han vuelto, con la cercanía de la Navidad. Una receta que se mantiene inmutable y que se basa en una cobertura de almendras picadas, frutas escarchadas, azúcar y toques de agua de azahar. 

Las tiendas de Rodilla ofrecen dos tipos de roscones de reyes: con y sin relleno de nata. Y se puede comprar en dos formatos, de 350 gramos o de 750 gramos, por 18 o 36 euros respectivamente. Además, la cadena ofrece una opción menú en oferta que, bajo el nombre La Magia de lo Auténtico, ofrece una porción de su Roscón de Reyes con una bebida caliente (café, té o chocolate a la taza).

Una opción más reducida, pero mucho más solidaria, es el Corazón de Roscón, el roscón con nata más pequeño, de solo 125 gramos, y del que Rodilla destina todos los beneficios al proyecto de la Fundación A la Par.