No se debe tener una dieta basada en productos industriales, a pesar de que muchas veces se recurren a ellos. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), con el objetivo de guiar y aconsejar qué productos se deben consumir, ha elaborado un informe con 113 productos de tomate triturado y tomate frito.
Estos productos aunque son procesados utilizan principalmente tomate, alimento bajo en calorías y en grasas y además con vitaminas (A, D, E, del grupo B y también C), y aceite de oliva y girasol. Por ello, en términos generales, la mayoría de los que se venden en supermercados no son muy perjudiciales, tienen niveles bajos de grasas, grasas saturadas y azúcares, aunque sí sobrepasan las cantidades recomendadas de sal.
Del análisis solo hay 9 tomates envasados que tienen la clasificación más baja en el sistema Nutriscore, método que la OCU ha utilizado para la evaluación en base a las proporciones de los ingredientes. La clasificación de los productos van de la A a la E, siendo la primera letra la opción más correcta y la última la peor, la más baja que se ha detectado en este estudio ha sido los productos con una calificación C, la intermedia.
Tomate frito casero Juan Ranas
Este tomate es de una cadena gourmet que como se puede comprobar en la etiqueta contienen un nivel alto de sal, muy cerca de 1,60 gramos. Tiene un 84% de tomate y un 6,1% de aceite de oliva virgen extra.
Tomate frito receta artesana de Hacendado
El tomate frito de la cadena de Juan Roig aporta de valor nutricional más de 200 kilocalorías por 100 gramos, casi 1 gramo de sal y 15 gramos de grasas. La Organización recomienda mejor la opción de tomate triturado de Hacendado.
Tomate frito receta tradicional de Aliada
El tomate de la marca blanca de El Corte Inglés lleva: compuesto por tomate, aceite de oliva (15%), azúcar, sal, ajo y acidulante: ácido cítrico. Supone un aporte de 195 kilocalorías y supera el gramo de sal por cada ración.
Tomate frito Helios
Este producto, que no contiene gluten, aporta 92 kilocalorías por 100 gramos además de 3,3 gramos de grasa y 1,5 gramos de sal. Lo positivo es que no aporta grasas saturadas.
Salsa de tomate de la abuela de Carrefour
Este producto contiene 1,3 gramos de sal, 15 gramos de grasas y 2,1 saturadas por 100 gramos. Está compuesta por un 78% de tomate y un 15% de aceite de oliva.
Tomate frito como en sartén de Alipende
En Ahorramás está otro de los productos, que no siendo de los peores, es recomendable evitar. Este tomate frito contiene, por 100 gramos, casi 1 gramo de sal, 3,7 gramos de grasas y 2,1 de saturadas. De kilocalorías aporta las mismas que la del tomate Helios.
Tomate frito estilo casero de Orlando
La mítica marca de tomate Orlando que lleva vendiendo sus productos desde 1922 no ha conseguido estar en el ranking de los mejores valorados por la OCU. En el etiquetado se puede ver que aporta 94 kilocalorías por 100 gramos y que contiene de los niveles más altos de grasa: 5,2 gramos.
Tomate frito Freshona
Este tomate de Lidl no consigue una valoración positiva en el sistema Nutriscore, ya que aporta 1,50 gramos de sal y 92 kilocalorías por 100 gramos, y solo tienen un 26% de tomate concentrado. La OCU recomienda el tomate natural triturado de Orlando al 'estilo casero'.
Tomate frito Ibsa
Este producto contiene un 15% de aceite de oliva virgen extra y un 78% de tomate y aporta bastantes kilocalorías: 180.
