Los rojos y los comunistas siempre son malos, doña Espe

Esperanza Aguirre calienta motores a toda velocidad. La presidenta del PP de Madrid quiere ser -sí o sí- la alcaldesa de la capital española y sabe que el tiempo vuela y que ella lo tiene muy crudo, aunque esté -según las encuestas- muy por encima de Ana Botella y de Cristina Cifuentes. Busca votos con desespero y no pierde ocasión para ir pescando en el río de la derechona.

Una vez más, Aguirre ha recurrido para satisfacer sus necesidades políticas a Telemadrid, la tele propiedad de doña Espe. Se sacó ella de la manga, una vez más, a un tal profesor Carromero. Ángel Carromero es ya un veterano secretario general de las Nuevas Generaciones del PP madrileño. Su papel, en un desgraciado paripé cubano, es el de víctima del automovilismo.



Víctima del comunismo de los hermanos Castro
O, mejor dicho, víctima del comunismo de los hermanos Castro. Los servicios secretos del tirano Gobierno de Cuba habrían sido los autores ocultos de un accidente mortal, dicen los peperos. Carromero conducía el coche y salió ileso. La culpa la tiene Cuba. Y en España, la culpa es de Willy Toledo, gran actor y productor de teatro. ¡Cuidado, Willy, que la lideresa no se anda con chiquitas y para ella los rojos son siempre malos!

Muerte bajo sospecha
Carromero ha escrito -cosas veredes, amigo Cid- un libro Muerte bajo sospecha. Le aplaude su hada madrina, también llamada Esperanza. Glorioso discurso de la neoliberal Aguirre: "Si todos los países occidentales nos plantáramos a los desmanes de esta dictadura, qué pronto volvería la libertad a Cuba".

La mansión cubana
Y además, Willy Toledo, tú vives en una mansión cubana para la élite del comunismo, le espetó doña Ana Samboal, otra periodista de la cuerda popular. ¿Y cuánto gana Carromero? Pues un dinerito bastante abundante en su calidad de asesor del Ayuntamiento de Madrid, el objetivo con el que sueña Aguirre.

Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM
En Twitter es @enricsopena