Pero no se vayan ustedes a equivocar, si no hemos presentado el programa no es por falta de iniciativas, y mucho menos por el temor a que si lo hacemos podamos perder las elecciones, no, ha sido porque la aportación de ideas y de proyectos por parte de todos ha sido tan grande, que no hemos podido redactarlas todas a tiempo.

Tendrían que haber estado ustedes allí, en las distintas comisiones, y hubieran visto el hervidero creativo que es el partido que les va a gobernar los próximos cuatro años. De alguno de los planes se han publicado ya cosas. Se sabe, por ejemplo, que maricones y machorras tienen crudo casarse más allá del 20 N; también que más les vale que aborten antes de esa fecha los que quieran condenarse sólo al infierno y no a la cárcel y que vamos a estudiar volver a implantar, como en tiempos del Generalísimo, la cadena perpetua.

Pero esto son sólo apuntes, apenas un borrador de todo lo que les estamos preparando. No quiero chafarles la sorpresa, pero me cuesta no avanzarles algunas de las ideas que estamos madurando. Para comenzar debo desmentir por completo el falso rumor que corría estos días en twitter sobre la legalización del lanzamiento de enanos para disminuir el paro. Si es cierto, sin embargo, que estamos estudiando diversos planes para unificar y reducir costes de departamentos que hasta ahora trabajaban por separado.

De entre todos ellos, el que tenemos más avanzado es el que viene a unir sanidad, con Inserso y educación. El plan es el siguiente: aprovechando que muchos niños de comunidades como la de Madrid (a la que a partir del 20 N se unirán muchas más) que asisten a colegios públicos difícilmente van a tener cabida en las aulas, se les mandará a que aprendan directamente de la voz de la experiencia, de los ancianos, comenzando por los ancianos de Castilla la Mancha (insisto en la idea de que en breve se unirán más comunidades). Entre otras materias aprenderán geografía manchega. Juntos, niños y ancianos, recorrerán los pueblos de la comunidad a la búsqueda de alguna farmacia que aún expenda medicamentos con receta. Esta actividad será sufragada, en principio, con el dinero que el Inserso dedicaba para viajes a lugares sin el mínimo interés cultural como Benidorm.

Cuando concluyan el periplo manchego, que conforme avance el tiempo cada vez será más largo e infructuoso, los ancianos que se den por vencidos, serán trasladados a Cataluña junto con los niños que los acompañan. Allí pasarán a engrosar las listas de espera de los hospitales, y aprovecharán para aprender catalán; los ancianos el tiempo que les quede y los niños varones el tiempo medio de espera en la comunidad para una operación de fimosis, unos dos años. En el caso de las niñas, al finalizar los dos años, si no han contraído ninguna enfermedad en el hospital que las retenga allí, serán devueltas a Madrid como servicio doméstico bilingüe.