El Ayuntamiento de Madrid tiene planeado aumentar las restricciones de circulación a vehículos en episodios de alta contaminación. Así las cosas, el consistorio de la capital de España quiere prohibir a los coches que no dispongan de distintivo ambiental -la conocida como ´pegatina de la DGT´- circular ni en dentro de la almendra central limitada por la vía M-30 ni por toda la ciudad. Hasta ahora se limitaba la movilidad de los vehículos en función de si tenían matrícula par o impar, dependiendo del día.

Cambios en el protocolo anticontaminación a partir de verano

Está previsto que la vigencia de esta nueva norma comience a partir de finales de este mismo verano, cuando se apruebe el borrador definitivo. Se trata de una decisión parecida a la implementada en Barcelona desde el pasado 1 de diciembre. Y es que en la ciudad condal y en su zona metropolitana se limitará por completo la circulación de los vehículos más contaminantes en los días de mayor polución.

Una de las principales razones para la realización de este nuevo borrador es que el anterior, aprobado en enero de 2016, se ha quedado obsoleto y, además, ha demostrado no ser eficaz. El nuevo protocolo tendrá más en cuenta a los distritos del exterior de la M-30, ya que se ha comprobado que también registran altos niveles de contaminación.

De este modo, para activar el protocolo anticontaminación solo hará falta que tres estaciones de cualquier zona registren los 180 microgramos de dióxido de nitrógeno por metro cúbico -preaviso- o los 200 microgramos durante tres horas consecutivas -aviso-. Recordemos que hasta ahora era necesario que dos estaciones de la misma zona superasen los 180 microgramos -preaviso- o los 200 microgramos durante dos horas consecutivas -aviso-.

Una reducción importante de las emisiones contaminantes

Cuando esta medida sea llevada a cabo se espera que el tráfico de la ciudad de Madrid sea reducido en un 17,7%, según ha informado el área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid. Mientras tanto, se ha calculado que esta reducción traiga consigo un descenso de las emisiones contaminantes del tráfico en un 33,2%, lo que implicaría que fuese una medida más eficaz que las tomadas hasta ahora.