Hay arqueólogos que se pasan la vida buscando una yacimiento concreto. Surfers que dedican su vida a cabalgar la ola perfecta. Naturalistas que bucean en todos los océanos para encontrar al tiburón blanco más grande jamás registrado. Hay gente para todo.
Una hembra gigante
Es lo que han hecho un grupo de biólogos desde que en 2013 fue detectada por primera vez Deep Blue, un ejemplar de tiburón blanco hembra que es, según datos conocidos, el animal marino más grande jamás filmado (evidentemente, excluimos a los mamíferos acuáticos).
El encuentro se produjo en las aguas de Hawaii, bastante lejos de el lugar en el que fue vista por primera vez, en las costas de México. Deep Blue es una impresionante tiburón de más de siete metros y alrededor de dos toneladas y media de peso. Los expertos estiman que rondará los 50 años.
Bufet Libre
En el momento del contacto, Deep Blue disfrutaba de un auténtico bufet libre. Los restos de un cachalote muerto le estaban sirviendo de almuerzo. En total tranquilidad, dado que su tamaño hace que todos los demás carroñeros huyan ante su presencia.
Los buceadores documentaron el avistamiento y no tardaron en difundirlo a través de sus perfiles sociales. Y lo hicieron con un mensaje que basta ver las fotos para entenderlo. Los submarinistas defienden que, pese a su fama y su tamaño, Deep Blue es una tiburón muy pacífica y que no hizo ningún ademán de ataque a los submarinistas que disfrutaron nadando a su alrededor y tomando todo tipo de imágenes.
