El Consejo Español de de Investigaciones Científicas (CSIC) ha iniciado un experimento, el Seedling Growth-3, para probar si se puede cultivar plantas en el espacio, en un contexto sin gravedad. Una investigación que forma parte de la misión espacial SpaceX-11, de la Estación Espacial Internacional (ISS), que se lanzará el 1 de junio desde Cabo Cañaveral, en Estados Unidos, y se añadirá a la búsqueda de vida en Marte, entendiendo que el cultivo de plantas podría ser necesaria si hubiera vida humana.

Se enviarán semillas de la familia de la col

Es un proyecto codirigido por el investigador español Javier Medina, acompañado de un equipo europeo que incluye dos laboratorios franceses. Medina ha explicado que “este experimento, resultado de la colaboración entre grupos de investigación europeos y norteamericanos, es el tercero y último de una serie cuyo objetivo es conocer los efectos de la ausencia de gravedad sobre el desarrollo de las plantas para hacer posible el cultivo de especies vegetales de interés en el ambiente espacial”. En el desarrollo del experimento, se enviará a la ISS miles de semillas de la especie vegetal Arabidopsis thaliana, una planta de la familia la col, el nabo, el rábano y la mostaza, muy utilizada científicamente porque son muchos los datos que se conocen sobre ella.

Estrés como el de temperaturas extremas

En el contexto del espacio, sin gravedad, las plantas pueden sufrir un estrés comparable al que le provocan temperaturas extremas de frío y calor. El experimento tiene un precedente, el de un equipo estadounidense que consiguió hacer crecer lechugas en la ISS. Sin embargo, no se llegó a establecer por qué mecanismos biológicos se podría haber producido con éxito el crecimiento de las plantas, algo que se quiere averiguar en esta ocasión. Se analizarán factores como la luz. Dentro de nuestras fronteras, el experimento Seedling Growth-3 incorpora tecnología espacial española, y el análisis de las muestras en el CIB está financiado por el Plan Estatal de I+D+i. La preservación de las muestras para analizarlas en la Tierra se realizará con el instrumento FixBox, diseñado y construido por la empresa Sener S.A. con financiación de la ESA.