''Que pare un poco'' o ''tiene que ser broma''. Así de perplejos se han quedado algunos de los usuarios de las redes sociales al ver la felicitación de Año Nuevo que ha hecho César Carballo. Y es que, más allá de sus buenos deseos, lo que ha sorprendido a todos ha sido lo que se ve en la imagen que ha publicado.

Todo ha comenzado cuando el médico de Urgencias del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, conocido por ser un colaborador habitual de diversos programas de televisión como Horizonte o laSexta Noche y muy crítico, ha felicitado a sus seguidores la entrada al 2022.

Lo ha hecho este viernes, tan solo unos minutos antes de las campanadas, a través de un mensaje en su perfil oficial de Twitter en el que ha asegurado que “este debe ser el año de nuestro país”. Carballo ha explicado cuáles son sus tres deseos para ello: “vencer a la pandemia, sacar un tratamiento antiviral nacional y sacar una vacuna esterilizante nacional”.

Una curiosa imagen

“Y pase lo que pase y le pese a quien le pese, a luchar por qué considero justo y ético. Por vosotros”, se puede leer al final del tuit en referencia a un brindis. Sin embargo, lo que más ha llamado la atención de esto ha sido la fotografía que acompaña al texto. Y es que el urgenciólogo aparece sujetando una copa en la mano sobre la que ha puesto un objeto de plástico.

Se trata de un freelips, un dispositivo inventado y comercializado por el propio Carballo que tiene el objetivo de ''prevenir infecciones -como el coronavirus- por contacto físico entre los labios de la persona bebedora y el borde del vaso, taza, copa, o cualquier otro tipo de recipiente desde el que se bebe''.

Según explica en la propia página web del producto, ''te permite extremar las precauciones en cualquier lugar, una reunión con amigos, en el trabajo, en un bar, en una reunión familiar etc.
Sólo tienes que ponerlo en cualquier recipiente de bebida que vayas a utilizar y evitarás el riego de contagio''.

Las reacciones

Esto no ha pasado desapercibido en las redes sociales, donde la curiosa imagen ha provocado multitud de reacciones diferentes, como recordar la teletienda o ''denunciar'' la autopromoción. Sin embargo, la mayoría se ha fijado en lo mismo: que parece usarlo en su propia casa.