El portavoz de Esquerra en el Congreso, Gabriel Rufián, y la polémica escritora Lucía Etxeberría han protagonizado un fuerte encontronazo en redes sociales a causa de un mensaje que ha publicado el primero defendiendo el despido de un clarinetista por no tener un nivel óptimo de catalán. Este hecho ha provocado un intercambio de reproches entre el dirigente independentista y la escritora, donde se han afeado numerosos trapos sucios.

En concreto, todo ha empezado cuando Rufián se ha mostrado satisfecho en la red social X (antes Twitter) por el despido de José Joaquín, clarinetista de la orquesta municipal de Barcelona desde hace 27 años, por no tener el nivel C1 de catalán. Rufián, que se define como independentista catalán, ha aprovechado la ocasión para reivindicar el catalán como una de las diez lenguas más habladas en la UE, y criticar al Estado y al Gobierno por no reconocerla como oficial. "Lo lucharemos hasta el final", afirmaba el diputado de Esquerra.

Sin embargo, el tuit original de Rufián ya no está disponible, pues lo ha borrado. Al parecer, el motivo ha sido las numerosas faltas de ortografía y gramática que contenía el mensaje, y que fueron señaladas por la escritora valenciana Lucía Etxeberría. La autora hizo una captura de pantalla del tuit de Rufián y lo corrigió, mostrando los errores cometidos por el representante en el Congreso. "La ignominia de exigirle a un mozo de almacén el C1 cuando tu representante en el Congreso no podría aprobar ese examen", escribía la escritora, junto a la imagen del tuit corregido.

No obstante, la polémica, lejos de quedarse ahí, ha cogido más dimensión después de que Rufián haya aprovechado la mención de Etxeberría para volver a sacar a la palestra las acusaciones de plagio que persiguen a la escritora. "Es que lo tendría que haber copiado", ha replicado el portavoz de ERC. 

Pero, Etxeberría no se ha quedado atrás y ha vuelto a disparar más fuerte, esta vez recordando al catalán su promesa incumplida de abandonar la política cuando pasaran 18 meses. "Rufián solo iba a estar 8 meses en el Congreso. Rufián cobra 130.000 euros al año. Y cuando a Gabriel Rufián una mujer le hace una pregunta lo único que se le ocurre hacer es insultarla. No dar argumentos. Olvidando que su sueldo lo pagan mis impuestos y los tuyos", ha denunciado.