La periodista Verónica Fumanal es una de las analistas habituales de El Abierto, el espacio de tertulia política de Hoy por Hoy en la Cadena SER. Uno de los aspectos tratados este jueves ha sido el machismo que sufren las mujeres cuando acceden a puestos de poder, como es el caso de Jacinda Ardern, primera ministra de Nueva Zelanda, quien ha anunciado que renuncia a su cargo por falta de "energía".

"He dado todo de mí para ser primera ministra, pero también me ha costado mucho. No puedo ni debo hacer el trabajo a menos que tenga el depósito lleno más un poco de reserva para esos desafíos no planificados e inesperados que inevitablemente se presentan", ha confesado Ardem, quien ha querido dejar claro que no deja el cargo "porque sea duro", sino porque "conlleva una gran responsabilidad: "No tengo suficiente energía para hacerle justicia". Este hecho ha significado que una parte de la prensa de Nueva Zelanda le haya calificado de "llorona" en un bochornoso ejercicio de machismo. 

Ante este hecho, Fumanal se ha mostrado contundente en los micrófonos de la Cadena SER: "En política, y sobre todo en opinión pública, las mujeres sufren un doble rasero espectacular. Si una mujer es determinada, valiente y osada, se le dice que es mala y demoniaca, que es todo por el poder. Si una mujer sale con una visión empática de la política, de los cuidados, se dice que no está hecha para los mimbres del poder, que se tiene que ir para casa", ha exrpesado. 

A continuación, la comunicadora ha dado con la clave: "Las mujeres nunca tenemos el nivel perfecto para estar en los lugares de responsabilidad porque somos muy hijas de puta o muy blandas. Y ese es el problema, ya que los hombres siempre tienen el liderazgo adecuado y especial. Si uno tiene un liderazgo testosterónico, más estilo Aznar, es que tiene un par de narices. Y si es un señor más empático, más trasversal, tipo Zapatero, es que tiene un liderazgo muy humano", ha proseguido. 

Finalmente, así ha finalizado la analista su intervención: "Este es el machismo estructural que sufren las mujeres en política y en todos los lugares de responsabilidad. A las directivas les pasa", ha rematado.