Frank Cuesta vuelve a estar en el ojo del huracán mediático. Tras publicar varios vídeos en los que hace una serie de confesiones que destapan todas las mentiras que ha contado, el conocido presentador y autodenominado defensor de los animales ha generado una gran controversia. En estas grabaciones, Cuesta admite haber mentido de forma continuada a lo largo de los años, tanto sobre su salud como sobre su labor en defensa de los animales, su formación académica y su vida personal.

En este contexto, las reacciones no se han hecho esperar, y muchas figuras públicas han expresado su indignación y sorpresa ante lo que consideran un engaño prolongado y premeditado.

Natalia Ferviú opina de las confesiones de Cuesta

Entre las voces más críticas se encuentra la de la estilista, DJ y colaboradora televisiva Natalia Ferviú, quien no ha dudado en recordar públicamente el episodio de acoso que vivió a raíz de un conflicto con Cuesta en el pasado. Según Ferviú, tanto él como sus seguidores la sometieron a un linchamiento digital que tuvo un impacto profundo en su salud emocional: “El daño ya está hecho. Desafortunadamente, no es posible dar marcha atrás para borrar el linchamiento que sufrí por parte de este señor y sus seguidores más ‘fieles’. Lo pasé mal. Muy mal”.

Además, Ferviú ha confesado que, en aquel momento, optó por guardar silencio y no responder públicamente a las provocaciones de Cuesta, ya que, según sus propias palabras, no quería ofrecerle la atención ni el protagonismo que buscaba: "Eso es precisamente lo que ese tipo de personajes buscan".


Sin embargo, ahora ha decidido hablar sin tapujos. Además del hostigamiento en redes, Ferviú ha denunciado un episodio de homofobia que vivió personalmente cuando coincidió con Cuesta en una emisora de radio. Según relata, el presentador lanzó un comentario despectivo al llegar al estudio, dirigiéndose directamente a un miembro del equipo: “Me hubiese encantado poder contar entonces que, al llegar aquel día a la radio, en lugar de decir ‘Hola’, lo primero que dijo, mirando a Gonzalo de producción, fue: ‘¡Qué pinta de marica tienes!’”.

Este tipo de actitudes, afirma la estilista, forman parte de una conducta dañina que muchos han decidido ignorar durante años, posiblemente por miedo a las consecuencias o por no querer enfrentarse al personaje mediático que Cuesta había construido con tanto éxito. Como cierre de sus declaraciones, la presentadora ha querido lanzar un mensaje directo al presentador a través de la red social X. Con un tono crítico, pero cargado también de cierto alivio personal, escribió: “Que te vaya bonito, Frank Cuesta. Te deseo de corazón que aproveches el haberte quitado tremenda mochila llena de mierda para revisarte y ser un tipo, además de honesto, mejor. Yo también voy a andar más ligera a partir de hoy. Firmado: Una animalista de teclado”.

Las alarmantes verdades de Frank

El origen de esta ola de reacciones se encuentra en los recientes vídeos que Cuesta ha subido a su canal de YouTube. En ellos, reconoce que nunca ha tenido cáncer, a pesar de haberlo insinuado o afirmado en diversas ocasiones, y que jamás ha rescatado animales, tal como había mostrado en su programa Frank de la jungla. Según sus propias palabras, todo fue parte de un montaje que comenzó como una estrategia mediática y que, con el tiempo, se le fue de las manos.

Además, Cuesta ha admitido no tener formación profesional como veterinario ni como herpetólogo, dos títulos con los que se había presentado públicamente durante años. A pesar de que cuenta con ciertos conocimientos, ha confesado que estos no se corresponden con una formación reglada ni con una titulación oficial: “Se me ha ido yendo de las manos por un grave problema que tengo de mitomanía y ego. Ni soy veterinario ni soy herpetólogo. Tengo conocimientos que no son básicos, pero tampoco son conocimientos profesionales”.

Estas declaraciones han conmocionado tanto a sus seguidores como a muchos espectadores que, durante años, creyeron firmemente en su labor y en su compromiso con el bienestar animal. También ha generado debate su revelación sobre la inexistencia de su supuesto santuario de animales, un espacio que, según él, fue parte del personaje ficticio que construyó para la televisión y las redes sociales.

En un tono más personal, el propio Cuesta ha explicado que atraviesa un momento complicado a nivel emocional, lo que habría contribuido a su decisión de contar la verdad. Aun así, la gravedad de sus afirmaciones ha generado una gran indignación entre quienes confiaron en su relato durante tanto tiempo como su amigo streamer Plex.

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