La música es el vehículo por el que se suelen lanzar indirectas a esa persona querida o a aquella que nos ha hecho daño. Motivo por el que la vida privada de los artistas, en multitud de ocasiones, se refleja en sus letras. El último caso que refleja este hecho a la percepción es Ausente, la última canción de Malú.

Y es que la cantante, que recientemente cortó su relación con el expolítico Albert Rivera, ahora ha vertido multitud de pistas en su nuevo single sobre la ruptura, siguiendo el paso que ya marcó Shakira con varias de sus últimas canciones dirigidas íntegramente a su ex, Gerard Piqué, y a su actual novia, Clara Chía.

Con un claro mensaje que evoca al desamor y al “malquerer”, Ausente es una canción compuesta junto a Pablo Alborán y que salió a la luz este jueves, acumulando ya más de 50.000 visualizaciones en menos de 24 horas en las principales plataformas.

“No entiendo por qué me siento tan sola cuando estoy contigo. Explícame el problema, porque yo no lo consigo. / Eres un extraño que pasea por mi casa, no te reconozco, no comprendo qué te pasa. Dices que me quieres cuando ves el precipicio. Malquerer se ha vuelto un vicio”, estos son algunos de los versos que componen la canción de Malú, claros reflejos que evocan a su última relación romántica.

No obstante, hay otra parte de la letra que es una clara indirecta para el ex dirigente principal de Ciudadanos: “Y yo te levante, y eso no lo sabe nadie. Fui yo quien aguanté el eco de mi nombre en todas partes. Ausente, por mucho que lo intentes”. Unas palabras que podrían referirse a la exposición mediática de ambas, especialmente a la del expolítico tras su declive en la formación naranja y su posterior etapa profesional como docente en una universidad impartiendo clases de liderazgo político.

Ausente también culmina con una breve referencia que se dirige directamente a lo más importante de su vida: su hija Lucía, que acaba de cumplir tres años. “Pase lo que pase… ella va primero”.

Pese a que esta podría ser las palabras más evidentes de Malú tras la ruptura con Rivera, lo cierto es que, en una entrevista para la revista de moda Elle, ya se pronunció hace unas semanas atrás: “No soy ni seré la primera ni la última persona que se separa. En ocasiones, crees en algo y luchas por ello con todas tus fuerzas. Pero a veces no se da. Y no es culpa de nadie, no es malo ni bueno, sucede sin más”, reflexionó.

Pese a este desamor, Malú también reconoció en estas declaraciones que seguía confiando en el amor. “Sigo creyendo. Siempre. Pero no solamente en el que puedes sentir hacia tu pareja, sino en el amor a la familia, a la vida, a los hijos… Creo en esa pureza del amor. Hay quien dice que una madre es capaz de levantar un camión si su hijo está debajo. Yo creo que esa frase lo define”, expresó.

La nueva ilusión de Albert Rivera

La ruptura definitiva, tras meses de rumores, entre la cantante y el expolítico se dio a principios de este verano y, apenas dos meses después, la prensa del corazón, en concreto, la revista Lecturas, captó unas imágenes de Rivera en una actitud pasional con la actriz Aysha Daraaui en una playa de Cádiz pero, días después, los mismos medios de comunicación sacaron a la luz otras fotografías de Rivera con la diseñadora Carla Cotterli a bordo de un yate.

Shakira y los himnos para tirar beef

Gracias a su colaboración con Bizarrap, la de Barranquilla marcó un antes y un después a la hora de dirigirse a un ex a través de la música, convirtiéndose además de un éxito mundial, en un modelo a seguir, ya que esta canción ha sido utilizada para estas circunstancias por miles de personas que han sufrido una ruptura e incluso imitada con variopintas versiones.

La cantante colombiana también dejó alguna que otra pulla en otras colaboraciones y temas que se sucedieron después del hit conjunto con Bizarrap. Ejemplo de ello fue su canción junto a Karol G, TQC; posteriormente, con Manuel Turizo, Copa Vacía.