La cantante Madonna se encuentra en Barcelona con motivo de los dos conciertos que ha dado en el Palau Sant Jordi. Entre concierto y concierto, la reina del pop ha querido disfrutar de su esencia de la Ciudad Condal, razón por la que ha visitado algunos de sus lugares más emblemáticos. Es así como resalta una de las últimas visitas que ha hecho, ya que este viernes sobre las 15:35 horas Madonna ha visitado la Casa Batlló, edificio del arquitecto Antoni Gaudí y uno de los mayores atractivos turísticos del paseo de Gràcia.

Tras sus dos conciertos en Barcelona celebrados las dos últimas noches, ha entrado en la Casa Batlló a las 15.35 junto a dos personas: tras bajar del coche que la llevaba, varios mossos d'Esquadra le han hecho un pasillo entre los muchos turistas que suele haber ante la entrada principal del edificio.

Madonna ha salido de esta casa museo una hora después por una puerta secundaria y protegida también por mossos, tras pasar al menos por la primera planta y por el patio trasero del edificio, de 1912.

La cantante iba vestida de negro, con gorra, trenzas y gafas de sol, y ha sorprendido a los peatones y turistas que había en la calle.

El próximo concierto de su gira de despedida tendrá lugar el próximo lunes 6 de noviembre en Lisboa (Portugal). Por eso su estancia en Barcelona está a punto de culminar.

Esta no es la primera vez que se deja ver por las calles de la Ciudad Condal, ya que el pasado martes fue vista andando en bicicleta con un look deportivo por el agradable paseo frente al mar de Barcelona.

En esta ocasión fue captada por las cámaras de la agencia Europa Press, que la fotografió dando un paseo en bicicleta como hacen habitualmente multitud de barceloneses.

Madonna se reafirma como reina del pop

En sus dos conciertos en España, Madonna se ha reafirmado como la reina del pop, con dos ‘sold out’ y con más de 18.000 entradas vendidas. En sus conciertos ha repasado sus 40 años de carrera musical en el marco de la gira mundial ‘The Celebration Tour’, que empezó el pasado 14 de octubre en Londres (Reino Unido) y terminará 78 conciertos más tarde con el paso por 15 países.

En un escenario inspirado en Manhattan y bajo una gigante bola de discoteca, Madonna ha viajado en sus conciertos en el Palau Sant Jordi a los años 80 con canciones como ‘Holiday’, ‘Live to tell’, ‘True Blue’ o ‘Like a prayer’.

Quizás el motivo más emotivo llegó con ‘La isla bonita’ y ‘Don’t cry for me Argentina’, que cantó llevando como capa la bandera LGTBI mientras se proyectaban imágenes de cantantes como David Bowie, Sinéad O’Connor y Ninna Simone.

En sus conciertos en Barcelona, Madonna hizo 17 cambios de vestuarios y colaboró con cuatro de sus hijos.

Madonna, de 65 años, es uno de los grandes nombres de la historia del pop, y sigue haciendo historia triunfando y llenando estadios hoy en día, pero en los últimos tiempos ha tenido que hacer frente a críticas a su físico y a sus estilismos. Siempre clara en sus opiniones, la cantante no se ha cortado a la hora de rebatir a quienes la critican.

Es así como responde en redes sociales a algunas de las críticas. En febrero, la reina del pop escribió en una publicación en Instagram: “Una vez más, estoy atrapada en el foco de la discriminación por edad y la misoginia que impregna el mundo en el que vivimos. Un mundo que se niega a alabar a las mujeres de más de 45 años y siente la necesidad de castigarlas si siguen siendo fuertes, trabajadoras y aventureras. Nunca me he disculpado por ninguna de mis elecciones artísticas ni por mi aspecto ni por cómo me visto, y no empezaré a hacerlo ahora”.