José Manuel Soto, cantante y adalid de lo español. Es uno de los principales defensores de ‘la madre patria’ y de sus enseñas en el mundo de la música, donde casi todos “son de izquierdas”. Así lo ha asegurado el artista en una entrevista concedida al diario El Mundo. Un hombre al que no le va eso de morderse la lengua, sino que simplemente expresa sus opiniones, tal y como lo ha sostenido durante la charla en el rotativo.

Soto aborda la situación actual de España, dejando claro – por si no lo estaba ya – que lo de Tabarnia es una broma porque el “humor es la mejor arma” para aquellos que “no lo tienen”. Tras esto, reconoce que “llevan mucho tiempo dándome palos” y que se siente “muy orgulloso” de ser español y de “mi país”, pues considera que España es “el pueblo y la gente”, no los políticos. “Cuando insultan a España me están insultando a mí”, exclama el artista andaluz.

Preguntado por si se considera una docta opinión en la materia de defender a España, asegura que “no pretendo ser ariete de nada” porque “los que pensamos como yo también tenemos derecho a hablar”. También critica al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, porque “está cogido con alfileres muy potentes”, en referencia a los partidos independentistas.

De Cataluña a Franco

La actualidad también llama a preguntar al cantante por la Dictadura y la exhumación de los restos de Franco. Sin embargo, asegura que “no cualquier tiempo pasado fue mejor”, sino que “hay que ser crítico con los tiempos actuales”. Soto afirma que cada época tiene sus  “cosas buenas y malas” y responsabiliza a los partidos políticos de las malas en la actualidad, pues “son nidos de corrupción y trampolines para gente mediocre”.

Por su parte, señala que la situación es diferente porque se venía de una dictadura y en los años 70 “Serrat y Llach eran símbolos de libertad”. Reconoce que él se siente como estos dos artistas en su momento, es decir un “cantante de canción protesta” porque canta Soy español.

En referencia a la exhumación de Franco, Soto sostiene que “lleva muchos años ahí y nadie se acordaba de él”, por lo que no entiende “la necesidad que hay de estar resucitándolo”. Asimismo, afirma que la época franquista fue “durísima” y más concretamente “los primeros años. Asegura que con el Dictador “había mucha pobreza y gente encarcelada por sus opiniones”, pero declara que “lo que ha venido después” no es perfecto.

España y los españoles

Define el país como “gente trabajadora”, pese a que hay “mucha corrupción en la política”. No obstante, señala que “ni todos los políticos son corruptos ni es un país de corruptos”. Él relaciona la corrupción con el tiempo que pasa un partido en el poder, como es el caso del “PP en Valencia y del PSOE en Andalucía”.

No se define como votante del Partido Popular, pero sí considera que el hecho de que gobernara el PP en Andalucía sería “higiénico democráticamente”. Eso sí, reconoce que Susana Díaz vende bien. No obstante, califica al PSOE de esta comunidad autónoma como “populismo de izquierdas”.

Pero la guinda del pastel llega cuando le preguntan por Podemos y reconoce que tiene sus sospechas sobre el voto que puedan realizar sus hijos. “Creo que mis hijos les votan”, declara después de incidir en que “mucha gente buena” se decanta por la formación de Pablo Iglesias.

Sin embargo, Soto no ve normal “el resentimiento” que existe en la clase dirigente del partido, amén de sus referentes, que se corresponden con “dictaduras asesinas” como Venezuela y Cuba.