Jorge Javier Vázquez es uno de los rostros más visibles de la televisión que no tiene ningún pudor a la hora de defender los derechos del colectivo LGTBIQ+. Implicado incluso en el ámbito político, se le pudo ver hace unos meses apoyando al candidato socialista en las elecciones de la Comunidad de Madrid, el catalán no ha dudado en calificar en alguna ocasión a su programa como "de rojos y maricones".

En su blog para la revista Lecturas, Vázquez ha hablado con claridad sobre su infancia asegurando que "antes de ser maricón era 'el maricón'". De esta manera, el actor ha explicado que incluso antes de él conocer su atracción por los hombres ya los demás lo daban por hecho.
El conductor de Sálvame, que considera que no sufrió acoso en el colegio por ser gay, confiesa que palabras como "marica, moña o sarasa", sí le acompañaron a lo largo de su infancia. También recuerda el miedo que sufría a defraudar a sus padres ante la posibilidad de que se enteraran de los insultos que recibía y que estos se avergonzaran de él.
Aunque Jorge Javier Vázquez no compartió con su entorno familiar su orientación sexual, se considera afortunado puesto que "el sufrimiento fue soportable". Lo que sí produce "pavor" al filólogo es la deriva que se está produciendo en los últimos años en los que "en vez de avanzar, retrocedemos".
Vázquez se muestra perplejo y no comprende qué ha podido pasar para que, a día de hoy, se este produciendo un retroceso en los derechos que el colectivo LGTBIQ+ ha ido poco a poco conquistando. "No entiendo cómo hemos sido tan permisivos con esos discursos que atentaban contra nuestra dignidad", escribe indignado mientras señala a los medios de comunicación por dar voz a quienes siembran odio y destrucción.

Prueba de que estos discursos de intolerantencia calan en la sociedad es el incremento de agresiones contra miembros del colectivo. "La gente vuelve a tener miedo de salir a la calle, algo que hacía mucho que no existía", subraya el empresario haciendo hincapié en que una sociedad que no acepta la diversidad es una sociedad echada a perder.
"Lo que no debemos tolerar es que se nos rechace por nuestra condición sexual. Que no tengamos los mismos derechos que los demás. Que no podamos vivir en libertad, sin miedo", considera el escritor de La vida iba en serio.
Pese a que en su trabajo no ha sufrido discriminación por su condicional sexual, piensa que la televisión es un mundo paralelo y conoce muchos casos de personas que, "esconden su orientación sexual en sus trabajos por miedo a represalias".
Por último, Jorge Javier Vázquez concluye su testimonio afirmando que no se puede "mirar hacia otro lado" y que "la lucha continúa" frente a aquellos que siempre están dispuestos a recortar los derechos. "Hoy por hoy, estamos fallando. Pongámonos a rectificar ahora mismo. No hay tiempo que perder. Hay vidas en juego", apunta el carismático presentador.