Este lunes se hacían virales las declaraciones de Daniel Asor, un rabino ultraortodoxo que predica que la vacuna contra el coronavirus hace que la gente que se la inyecta se vuelva homosexual como efecto secundario de la misma.
A pesar de que cuenta con una comunidad de 7.400 seguidores en YouTube, sus palabras han generado polémica en las redes. El predicador asegura también en sus vídeos que el colectivo LGTBIQ+ es malo y, en cuanto a la pandemia, también se suma al discurso negacionista en cuanto a su creación, ya que sustenta el virus ha sido creado por la Masonería, los Iluminati y el cofundador de Microsoft, Bill Gates, para "establecer un nuevo orden mundial".
En este sentido, unas de las reacciones más sonadas en Twitter han sido las de la actriz Ana Milán, la cual ha querido plantear en medio del revuelo la cura para otra enfermedad: "¿Y de curar la estupidez humana se sabe algo o hay que seguir esperando?", escribía la intérprete.
