Este año, se espera que el 20% de las compras que se realicen en el mundo, sean a través de internet. En total, nos gastaremos unos 6,3 billones de dólares [5,8 billones en 2023] en comercios electrónicos. Es un pastel demasiado grande como para que Google no quiera comerse un buen trozo.
Por eso, Google te quiere poner fáciles las compras y, de paso, seguir generando ingresos, claro está. Y esos beneficios deberían ser cada vez mayores, puesto que las perspectivas apuntan a que en 2027 la cifra ya habrá llegado a los 7,9 billones de dólares.
La estrategia de Google parece ser ponértelo fácil a la hora de comprar
Google te lo quiere poner fácil
La estrategia de Google parece ser ponértelo fácil a la hora de comprar en internet. La compañía acaba de presentar Google Shopping, con la que “puedes encontrar exactamente lo que necesitas, buscar con opciones personalizadas y conseguir los precios más bajos”.
Es su manera de tratar de obtener más rentabilidad todavía de su modelo de publicidad: “La gente va de compras en Google más de 1.000 millones de veces al día y hace cosas como probarse la ropa antes de adquirirla, comprar lo que ven con Lens y comparar precios”.
Google ha utilizado la IA para ofrecerte productos que te puedan interesar
Llegó la inteligencia artificial al proceso de compra
Ahora, la compañía explica que han estado “utilizando nuestros avances en inteligencia artificial [IA] para hacer que comprar sea todavía más fácil”. Por eso, han incorporado esta tecnología a Google Shopping y la han entrenado con 45.000 millones de productos.
La IA se utiliza para “mostrarte de forma inteligente los productos más relevantes y ayudarte a hacer tu búsqueda más rápida y simple”. Según explica Google, la herramienta te muestra una serie de productos que te pueden resultar interesantes. Es decir, una tienda digital de toda la vida, con la que presentar batalla a los grandes de este mercado.
Los líderes del mercado digital
Hasta ahora, el gran dominador de las ventas digitales ha sido Amazon. Ya poca gente recuerda que empezó como una simple librería, porque hoy acapara el 37,6% de las ventas por internet. Es decir, uno de cada tres productos se compran en su web.
Sin embargo, las tendencias están cambiando. El año pasado, la compañía de Jeff Bezos tenía una cuota de mercado ligeramente superior, el 37,8%. La nueva apuesta de la compañía de Larry Page y Sergey Brin [liderada desde 2015 por Sundar Pichai] es apoyarse en la tecnología para mejorar la experiencia de usuario.
Más personalización en las compras
“Comprar es algo personal; por eso la página de inicio de Google Shopping tiene un feed [muro] personalizado que te inspira con productos comprables y vídeos basados en tus preferencias”.
Otra de las novedades es que guarda las búsquedas que has realizado, para que no tengas que volver a empezar cada vez o a guardarte mil enlaces para consultarlos más tarde.
Nuestra experiencia
En la redacción telescópica hemos hecho la prueba de acceder a Google Shopping desde distintos ordenadores, uno de ellos incluso con Brave como navegador, para analizar su comportamiento.
De entrada, muestra los mismos productos y las mismas secciones a todos los usuarios [o eso parece]. Así que, en principio, no se distingue de la página inicial de cualquier tienda digital, salvo en el hecho de que tiene más scroll.
Es de suponer que, como sucede siempre con este tipo de herramientas, vaya ajustando las propuestas en función de su uso. Está claro que lo primero que hace es mostrarte artículos con diferentes rangos de precio en todas las categorías, para ver en qué nivel de gasto te sitúas.
Las categorías que muestra también parecen un poco como para sondear tus preferencias: electrónica en primer lugar, por supuesto; decoración para el hogar; cocina y comedor; juguetes; artesanía y manualidades y electrodomésticos para cocina.
Futuro
En principio, nada está personalizado, no utiliza tus búsquedas anteriores, ni tiene información sobre tus intereses y preferencias. Lo que no sabemos [todavía] es cómo irá evolucionando.
Y, sobre todo, cómo irá evolucionando el modelo publicitario subyacente. Porque está claro que existe. Si no, es difícil justificar que la mayoría de los productos que ofrece en una categoría determinada sean de una misma marca.
Pero, no queda duda de que la propia compañía es consciente de sus limitaciones: “Según vayas usando Google Shopping, verás la etiqueta experimental en los resúmenes generados por IA. Eso es porque esta nueva funcionalidad experimental puede no siempre entenderte bien, así que animamos a los compradores a darnos comentarios en el menú de los tres puntos, para ayudarnos a mejorar”.