Todo comenzó como un proyecto de tesis universitaria, y con la convicción de que han de implantarse técnicas más ecológicas en la industria cinematográfica. Ahora, su autor, Roberto Zamora, junto con su hermano Juan Pablo y algunos amigos, ha fundado el colectivo Fën Pictures, así llamado porque "Fën", semilla en mapudungun (idioma de los mapuches, un pueblo amerindio que habita en Chile y Argentina), les sirve de símbolo a favor del acercamiento a nuestros pueblos originarios y asumir su respeto por la naturaleza.

Ciudado hasta el detalle

Con la empresa se han dedicado a realizar trabajos a base, solo, de técnicas sostenibles, como su cortometraje Santiago y Paloma, en cuyo rodaje se utilizó un equipo técnico (cámaras, ordenadores, etc.) cargado a partir de una placa solar, se sirvió un catering orgánico y vegano, el departamento de arte aprovechó materiales reciclados (extraídos, a veces, incluso de la basura), y el personal se movilizó en bicicleta. Por último, para no generar desperdicios, con los alimentos que sobraron hicieron un compost, y los materiales de arte fueron rifados para que no terminaran en la basura. Santiago y Paloma se estrenó el 7 de marzo en la página de Facebook de la productora, para, días después, alojarse en Youtube.