Algo está pasando en el mundo del arte… y es raro. El arte digital se está convirtiendo en el objeto de deseo de coleccionistas de todo el mundo. Ayer se cerró en Christie’s la subasta de Everydays: The First 5000 Days, de Beeple [la puedes ver en la imagen de más arriba]. ¿La puja ganadora? Nada menos que 69.346.250 dólares estadounidenses. O, si prefieres euros, 58.072.976,87.

Según explica la ficha de la firma de subastas, se trata de un NFT [tranquilidad, un poco más abajo te lo explicamos] de 21,069 x 21,069 píxeles (319,168,313 bytes), acuñada el 16 de febrero de 2021. Y destaca: “Esta obra es única”.

La puja ganadora fue de 58.072.976,87 euros

Beeple se está convirtiendo en el artista digital más cotizado. Imagen: Beeple

Beeple se está convirtiendo en el artista digital más cotizado. Imagen: Beeple

NFTs o Niftis
Esa es la pregunta que se hace mucha gente. ¿Por qué tengo que pagar tanto por una obra, cuando sus casi dos millones de seguidores en Instagram también la tienen o puedo descargármela y tenerla en mi ordenador? La explicación son los NFT [pronunciado nifti o niftis en plural]. Pero antes de contártelo, otro ejemplo.

Beeple tiene casi dos millones de seguidores en Instagram, con acceso a todas sus obras

Beeple tiene casi dos millones de seguidores en Instagram, con acceso a todas sus obras

El 4 de marzo, la empresa Injective Protocol adquirió un print [una impresión] de una obra de Banksy, Morons (White). Pagó 95.000 dólares a la Tagliatella Gallery por ella. Después, le pegaron fuego y retransmitieron la quema en directo en su cuenta de Twitter BurntBanksy. Después, crearon una imagen digital y, por supuesto, le asignaron su correspondiente NFT. Es decir, crearon una obra de arte que es la quema de otra obra de arte.

Como era de esperar, la subastaron y consiguieron 228,69 ether [una criptomoneda menos famosa que bitcoin], equivalente a algo menos de 32.000 euros.

Un NFT es, en el fondo, blockchain

Blockchain

Ahora que ya sabes que se puede ganar mucho dinero con ellos, te explicamos qué son. Un NFT es, en el fondo, blockchain. Al crear una obra y asignarle uno, se convierte en infalsificable [con la tecnología actual, por supuesto].

NFT significa non-fungible token, lo que podríamos traducir como identificador no intercambiable o no canjeable. Token puede significar también “ficha” [por ejemplo, las tradicionales de los coches de choque o un vale], O sea, que el NFT también es algo que puedes comprar y vender.

El volumen de negocio de estos niftis, ha superado los 400 millones de dólares en el último mes

Y se hace: el volumen de negocio de estos niftis, ha superado los 400 millones de dólares en el último mes, según Trading Platforms. Piensa con nosotros: si eres una persona a la que le interesa invertir en blockchain y no te fías de las criptomonedas [por su volatilidad y demás problemas], ¿por qué no invertir en criptoarte?

Mint = acuñar

Un término con el que debes familiarizarte es con “acuñar” [“mint”, en inglés]. Es el momento en que se crea el NFT. Es decir, la obra no es única hasta que se acuña en la blockchain.

La de Beeple es, según Christie’s la primera “puramente digital” subastada por la casa. Recoge sus creaciones diarias de trece años, un total de 5.000 imágenes, juntas en una única pieza.

Más ejemplos

Pero los NFTs no son nuevos. Ya en 2017 surgieron unas mascotas virtuales, los CryptoKitties o CriptoGatitos, que se compran y se venden. Algo así como la criptoversión de Pokèmon, con dinero de por medio.

También Jack Dorsey, CEO de Twitter, ha subastado el primer tuit de la historia, con su correspondiente NFT, por 2,5 millones de dólares el pasado día 9.

¿Puedo hacerlo yo? La respuesta es: por supuesto

En este punto, suponemos que tu pregunta es: ¿puedo hacerlo yo? La respuesta es: por supuesto. Tu siguiente cuestión será: ¿cuánto cuesta? Pues nada o casi nada.

El primer paso es crearte una cartera [wallet] de Ethereum. Una buena opción es ZenGo. De momento, es gratis. Y no tienes los famosos líos de las claves de las criptomonedas. La aplicación usa reconocimiento facial para saber que eres tú quien las está usando.

El segundo paso es crearte una cuenta en OpenSea. Y ya estaría. Solo te falta crear arte y conseguir que alguien quiera pagar millones por tus obras. Pero eso es lo más fácil…