En medio de la negociación del Gobierno por la regulación de los precios del alquiler dentro de la futura Ley de Vivienda, la oferta de viviendas en alquiler se ha disparado un 50% con respecto a niveles pre pandemia, precisamente por el impacto del coronavirus en el mercado inmobiliario.

En concreto, la oferta ha aumentado un 52% entre septiembre de 2019 y septiembre de 2020, según los datos presentados por Servihabitat, el gestor inmobiliario del fondo Lone Star y CaixaBank. Las cifras del gestor revelan que el tercer trimestre de 2020 cerró con más de 134.000 inmuebles en alquiler en España, frente a los 67.700 de un año antes.

“El volumen de vivienda en alquiler ha pasado de presentar algo más del 10% del volumen de viviendas que se encuentran en venta al 16,4%”, asegura el informe de Servihabitat. Desde la gestora explican los principales motivos de este aumento: “El traslado de propiedades turísticas y de alquiler a corto plazo al mercado residencial, así como el cambio de venta a alquiler en propietarios que no consiguen alcanzar sus expectativas”.

Además, el informe asegura que los precios no se han abaratado tanto como se esperaba por la irrupción de la pandemia. Esto ha provocado que se alarguen los plazos de comercialización de los arrendamientos y que, muchos de los habitantes de las grandes ciudades, hayan regresado a sus lugares de origen, gracias al impulso del teletrabajo y las restricciones a la movilidad.

Madrid y Baleares lideran el aumento de viviendas en alquiler

Estos movimientos han provocado el abandono de muchas de las viviendas en alquiler de los centros de grandes ciudades como Madrid y Barcelona. De hecho, el mayor aumento de la oferta de viviendas en alquiler se registra en la Comunidad de Madrid, duplicando la cifra desde los 14.600 inmuebles en alquiler hasta casi las 30.000 viviendas en alquiler.

Una tendencia similar se observa en Baleares, Ceuta y Melilla y Cataluña, con subidas del 85%, 77% y 70% respectivamente. En el lado contrario, solo La Rioja, Asturias, Extremadura y Cantabria registran una caída de su oferta.

Por otro lado, el informe refleja un aumento del tiempo que se tarda en alquilar una vivienda en España, a pesar del aumento de la oferta. Así, "ha aumentado respecto al año anterior, pasando de 1,64 meses en 2019 a 1,93 (58 días)", según las cifras de Servihabitat. La explicación de esta tendencia tiene que ver con que los inquilinos han optado por valorar varias opciones, ante el aumento de la oferta, así como por la mayor cautela por parte de los arrendadores a la hora de elegir inquilino, tanto por la situación económica como sanitaria.

A pesar del aumento de la oferta, el precio del alquiler ha subido casi un 2% en 2020, según el informe, hasta los 893 euros medios de renta mensual a cierre del año. Sin embargo, sí que observa un abaratamiento de la vivienda en alquiler desde el mes de septiembre, en los 914 euros.

La vivienda sigue siendo un “valor seguro” para la gestora, a pesar de todos estos cambios y de la incertidumbre derivada de la pandemia. Para ello, explican que la rentabilidad bruta media de la vivienda en alquiler en España subió más de un punto porcentual el pasado año hasta alcanzar el 6,8%.