El número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) bajó en 210.484 desempleados en 2018 (-6,17%), sexto descenso anual consecutivo, aunque el menos pronunciado desde el ejercicio 2013, ha informado este jueves el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.

El volumen total de parados alcanzó a cierre del pasado año la cifra de 3.202.297 desempleados, manteniéndose en su nivel más bajo de los últimos nueve años, después de registrar en el último mes de 2018 un descenso mensual de 50.570 desempleados (-1,5%), su menor retroceso en un mes de diciembre desde 2012.

Contra la reforma del PP

Ante esto, la secretaria de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social de UGT, Mari Carmen Barrera ha valorado los datos que ha arrojado el SEPE del recién finalizado año 2018. Considera que estas cifras "muestran un aumento esperado de la afiliación y una reducción del paro", pero atribuye estos a la "campaña de navidad".

Desde el sindicato ven "positivo" que la economía continúe en su proceso de reducción del desempleo, pero recuerda que "hay 3.200.000 personas que quieren trabajar y no pueden" y añade Barrera que "más de un tercio son parados de larga duración que llevan más de dos años en esta situación".

Sin embargo, sostiene la secretaria de Empleo del sindicato que, además, el empleo que se genera es "muy precario" y esto no cambiará hasta que "se reviertan los aspectos centrales de la reforma del PP". Pide al Gobierno que "tome las decisiones oportunas para los compromisos que adquirió con la clase trabajadora", sobre todo tras "meses de diálogo social" y le recuerda que "estamos dispuestos a modificar acuerdos esenciales en este ámbito".

Barrera considera "urgente" aumentar la cobertura de las prestaciones por desempleo y pide al Ejecutivo que "aumente la calidad de las mismas", dado que seis de cada diez parados registrados "reciben alguna prestación". Por último, solicita "la recuperación del subsidio para mayores de 52 años".