El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (2i), acompañado del presidente del Círculo, Josep Piqué (i), la delegada del Gobierno en Cataluña, Maria de los Llanos de Luna y el alcalde de Sitges, Miquel Forns. EFE El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (2i), acompañado del presidente del Círculo, Josep Piqué (i), la delegada del Gobierno en Cataluña, Maria de los Llanos de Luna y el alcalde de Sitges, Miquel Forns. EFE



Mariano Rajoy ha rechazado de un plumazo la propuesta de un modelo federal planteado por el PSC y la reivindicación de independencia de Artur Mas. En el Círculo de Economía de Sitges, que clausuró este sábado, el presidente del Círculo, Josep Piqué, reclamó al presidente del Gobierno que respondiera con  "altura de miras, racionalidad, sensatez y  sentido común", pero Rajoy descartó sin miramientos cualquier otra fórmula que no sea el actual modelo basado en la Constitución. "Para estar en Europa con fuerza se necesita ser grande, los pequeños no cuentan nada”, remachó.

Español y gallego
Sobre la propuesta soberanista de Mas, Rajoy ha dicho tajante: "Yo no voy a estar en una posición distinta. El modelo de Estado es el que está en la Constitución, que es muy descentralizado". Tras recordar que es "español y gallego", ha afirmado que la prioridad ahora pasa por la unidad ante la crisis.

Tilda de oportunista al PSC
Lejos de la racionalidad que le pedía Piqué, Rajoy ha calificado de "oportunismo" e "irresponsabilidad" la propuesta del PSOE sobre la reforma constitucional. "Ahora el PSOE dice que va a un modelo federal, pero hay que decir en qué consiste, y cuál, porque el alemán es mucho menos descentralizado que el nuestro. Sobre todo dígame usted que pretende, dejémonos de palabras, actuar en este tema con oportunismo es de una irresponsabildiad mayúsculoa y yo no me lo puedo permitir", ha señalado el presidente del Gobierno.

Reproches a la oposición por no apoyarle
Rajoy ha defendido sus medidas y ha reprochado a la oposición que no le apoyara en la reforma laboral o el recorte del déficit. "Si el programa que creemos que necesita España no les gusta a los demás no podemos hacer lo que dicen los demás, no es bueno para España y es dudosamente democrático", ha subrayado.

Críticas a los medios por poner la lupa en la corrupción
En cuanto a los casos de corrupción, que afectan especialmente a su partido, y la desafección ciudadana, el jefe del Ejecutivo ha atribuido esta última a la situación de crisis y ha subrayado que aunque “ha habido comportamientos claramente reprochables”, “hay mucha gente que trabaja muchas horas sirviendo al ciudadano”. Veladamente, Rajoy ha criticado que los medios de comunicación, “a los que opinan, a los que escriben”, presten más atención a los casos de corrupción que a iniciativas del Gobierno como la ley de transparencia.