La población española alcanzó los 47.100.396 habitantes por primera vez en la historia en el primer semestre de 2019, tras aumentar en 163.336 personas durante la primera mitad del año, según ha informado el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Este aumento de población corresponde a un saldo vegetativo negativo de 45.002 personas y un saldo migratorio positivo de 209.097 personas, el más alto desde 2009. Según las cifras, el aumento de la población española hasta sus máximos históricos se debe al incremento de la población extranjera frente al descenso de la natalidad española.
De hecho, la población extranjera aumentó en 183.073 personas durante el primer semestre de 2019 hasta las 5.023.279 personas. En este caso, los mayores aumentos se dieron en la población colombiana (27.920 personas), venezolana (24.238 personas) y marroquí (20.627). En el lado contrario, la población de nacionalidad española se vio reducida en 19.737 personas.
En cuanto a la inmigración, el 88,9% del total eran personas de nacionalidad extranjera, es decir, 309.874 personas, mientras que el 11,1% corresponde a españoles que vuelven a su país o que ya contaban con la nacionalidad española a pesar de estar viviendo fuera. Los principales países de procedencia de la población de nacionalidad española fueron Venezuela, Reino Unido y Ecuador.
En el lado opuesto, el 74,7% de los emigrantes eran extranjeros frente al 25,3% de los españoles que emigraron en el primer semestre de 2019, principalmente a Reino Unido, Francia y Alemania. En este caso, la cifra de emigración fue la más baja desde 2008.
Por comunidades, la población creció en 13 comunidades autónomas mientras que se vio reducida en las otras cuatro restantes y en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Así, Islas Baleares (0,87%), la Comunidad de Madrid (0,66%) y Canarias (0,61%) fueron los territorios donde se experimentaron los mayores crecimientos de población.
En el caso opuesto, las principales pérdidas de población se sufrieron en Extremadura (-0,25%), Principado de Asturias (-0,22%) y Castilla y León (-0,20%). En la misma línea, Extremadura, Andalucía y Castilla y León presentaron los saldos migratorios interiores más negativos a nivel nacional.
