La Comunidad de Madrid estima una pérdida de ingresos públicos del 90% por el impacto de la crisis del coronavirus. En concreto, el Gobierno dejará de recibir el 90% de la recaudación por el Impuesto de Patrimonio, bonificado al 100% en la comunidad, tal y como explica Antonio M. Vélez en elDiario.es.

Según las cifras del Gobierno de la Comunidad de Madrid, se dejarán de recibir 1.000 millones en ingresos por el impacto de la pandemia. Así lo confirmó el consejero de Hacienda y Función Pública del gobierno regional, Javier Fernández-Lasquetty, en el mes de julio. La estimación se mantiene, según fuentes regionales, aunque el impacto será superior.

Las cifras ofrecidas por Fernández-Lasquetty en julio serán superiores ya que no incluyen la segunda ola de rebrotes y solo tenían en cuenta el desplome de la recaudación hasta el 30 de mayo. Después de esta fecha, tanto los rebrotes en la región como el desplome del turismo han frenado la recuperación de la actividad económica disfrutada en los primeros momentos de la desescalada.

A pesar de esto, las pérdidas se mantienen por el momento en los 1.000 millones, cerca de lo que supone para la comunidad la bonificación al 100% del Impuesto de Patrimonio a las grandes fortunas. De hecho, según la Estadística de los declarantes de este impuesto en 2018, publicado por la Agencia Tributaria, la bonificación ascendió hasta los 905,3 millones de euros.

Alerta de la AIReF y la OCDE

La AIReF ha alertado ya del “aumento del riesgo de la sostenibilidad financiera” de Madrid a partir de 2021 por la crisis del coronavirus. Una consecuencia de la “abrupta caída” del crecimiento económico, el desplome de ingresos de transferencias estatales y el aumento “esperado” del gasto sanitario.

Tras varios cambios políticos, el PSOE recuperó el Impuesto de Patrimonio en 2011 y Madrid mantuvo la exención del 100%. Según las cifras citadas por elDiario.es, la comunidad habría dejado de cobrar a los patrimonios más ricos un total de 5.921 millones de euros en el periodo 2011-2018, es decir, 740 millones al año.

El debate sobre este impuesto está en la mesa y, por el momento, la Comunidad de Madrid descarta eliminar la bonificación total del impuesto a las rentas más ricas. El argumento para ello es que dicha bonificación estimula la recaudación de otros impuestos, como el IRPF, por atraer fortunas de otros territorios.

Por su parte, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha avanzado que una de las alternativas para paliar el impacto de la crisis es llevar a cabo una mayor imposición sobre la riqueza. En este aspecto, ha alertado de que en los próximos años la capacidad de acción sobre la imposición de la renta y del consumo va a ser muy limitada.

"Elevar los impuestos sobre el trabajo o sobre el consumo, como se hizo tras la crisis global de 2008, podría ser difícil políticamente y, en muchos casos, no deseable desde un punto de vista de equidad", explica la OCDE. Así, "la tributación de la propiedad y las ganancias de capital tendrán que jugar un papel importante, particularmente en el contexto de mejoras significativas en la transparencia fiscal internacional", recomienda.