La agencia de 'rating' Fitch teme que suba la morosidad en España impulsada por las medidas aprobadas por el Gobierno para ayudar a los hipotecados. Estas personas, según la agencia, podrían dejar de pagar sus deudas, especialmente en el caso de las familias con menores ingresos y todas aquellas en las que sus deudas están muy por encima del precio actual de su vivienda. Además, Fitch cree que ahora hay "muchos desincentivos" para que quienes pueden hacer frente a su hipoteca se lo planteen y consideren las ventajas que se les ha dado.

Salario inembargable
La agencia recuerda que el Ejecutivo ha dado luz verde a que a una persona morosa no se le podría embargar más de 960 euros, el 150% del Salario Mínimo (SMI) en España -sueldo inembargable-. En el caso de familias, a esos 960 euros se les suma 193 euros por cada miembro sin ingresos. Según Fitch, esto podría desincentivar el pago de las hipotecas y fomentar la "entrega de llaves" teniendo en cuenta que se han perdido incentivos fiscales por ella o el precio de los alquileres.
En este sentido, opina que los préstamos más afectados serán los concedidos a las familias con menores ingresos, aquéllas en las que el nuevo mínimo no embargable del sueldo cubre una gran proporción de sus gastos.

Perjuicio a los bancos
Por otro lado, la agencia señala que la decisión de elevar al 60%, desde el 50%, el precio mínimo de adjudicación en subasta de los inmuebles embargados "traslada las pérdidas potenciales desde el lado del obligado al del banco", señala Carlos Terre, director del equipo de crédito estructurado de Fitch en Madrid.

La morosidad repunta en mayo
Los créditos morosos de los bancos, cajas de ahorros, cooperativas y establecimientos financieros de crédito supusieron en mayo el 6,5 % del total prestado a familias y empresas españolas, su nivel más alto desde el mismo mes de 1995, según los datos provisionales publicados hoy por el Banco de España. Ese repunte es el segundo consecutivo desde que en marzo la tasa de morosidad se tomó un respiro y bajó hasta el 6,11 %, rompiendo así una racha de cinco meses consecutivos de subidas.
Con esta nueva subida, el volumen total de préstamos de dudoso cobro ascendió a 117.592 millones de euros al finalizar mayo, frente a un total de 1,81 billones concedidos a las familias y las empresas españolas.