Cuando sólo hay un candidato, sólo hay una opción. Así que los miembros de la CEOE lo van a tener muy fácil para escoger al sucesor de Joan Rosell al frente de la patronal. Durante la junta directiva celebrada hoy se ha fijado la fecha de las elecciones para el 21 de noviembre. Pero sólo una persona ha recogido suficientes avales y suscitado casi unanimidad al anunciar su candidatura, Antonio Garamendi. presidente de CEPYME, la patronal de la pequeña y mediana empresa y que ya compitió por el liderazgo con Rosell en 2014, perdiendo por un estrecho margen.
Se esperaba que Garamendi se enfrentase a Joaquín Gay de Montellá, presidente de la patronal Catalana Fomento del Trabajo Nacional. Sin embargo, el empresario catalán no ha llegado al presentar su candidatura, al no percibir apoyo suficiente a su candidatura, ni siquiera por parte de su propia organización.
Garamendi defiende que la CEOE tenga una posición más clara que en la actual etapa de Rosell en favor de la unidad de España y criticando abiertamente al independentismo. También ha criticado anteriormente el escaso calado de los mensajes de la patronal en la sociedad, así como la falta de transparencia en la organización. Sin embargo, en su intervención en la junta directiva de hoy, Garamendi ha manifestado su intención de defender la unidad de la patronal y de culminar el trabajo iniciado por el actual presidente, Joan Rosell, a quien ha agradecido su labor al frente de la misma en estas dos legislaturas.
Aunque la candidatura del empresario vasco se percibe como apoyada de manera unánime, aún hay plazo para presentar más candidaturas; concretamente hasta una semana antes de las votaciones, es decir: hasta el 14 de noviembre. Aunque no se prevén candidaturas alternativas y algunas de las organizaciones que conforman la CEOE ya han pedido que se modifiquen los estatutos para permitir la elección de Garamendi por aclamacion.
